"El debate de política general debe servir para acabar con el doble discurso de los socialistas en Barcelona y Madrid", estas fueron las palabras que utilizó la portavoz de Junts en el Parlament, Mònica Sales, para arrancar el curso político en una reunión del grupo parlamentario en Waterloo el pasado 15 de septiembre. Y es que los de Junts quieren alinear el discurso del Govern del PSC de Salvador Illa con el acuerdo de Bruselas entre Junts per Catalunya y el PSOE, ya que denuncian que, mientras pactan una cosa con el PSOE, el PSC hace otra. Lo harán llevando varias propuestas de resolución al debate de política general de esta semana en el Parlament de Catalunya, entre las cuales habrá la literalidad del acuerdo entre los de Junts y los socialistas. De hecho, Mònica Sales ha enumerado unas cuantas propuestas de los de Junts este lunes en una rueda de prensa, como son el concierto económico, la amnistía o la resolución del conflicto, aunque también podría estar la oficialidad del catalán en la Unión Europea o la delegación de las competencias en inmigración porque son acuerdos entre los dos partidos de los últimos dos años. Habrá que ver, sin embargo, la literalidad de las propuestas y hasta qué punto el redactado busca acorralar a los socialistas.

Y es que la relación entre Junts per Catalunya y el PSOE no pasa por su mejor momento, después de que no se hayan constatado avances estas últimas semanas. Las últimas dos reuniones con Zapatero, delegado de los socialistas para negociar con Carles Puigdemont, no han ido bien y todo hace pensar que si no vuelve a encarrilarse la relación este otoño podrían romper relaciones. El primer examen será el debate de política general, que servirá como termómetro. "Debe servir para saber si el PSC se alinea o se desmarca del acuerdo de Bruselas. No podemos admitir que juegue a dos bandas", ha dicho Mònica Sales este lunes desde el Parlament, desde donde ha advertido que "no aceptarán" maniobras para ganar tiempo por parte de los socialistas. "Estamos hartos del funambulismo del PSC", ha dicho Sales.

Las propuestas se tendrán que votar este jueves en forma de propuesta de resolución y habrá que ver cuál es la reacción de Junts per Catalunya, tanto después del discurso del president Illa, como después de las votaciones del PSC. "Nosotros tenemos unos pactos fruto del acuerdo de Bruselas y haremos una valoración al acabar el debate", ha avisado Sales, aunque los socialistas ya aseguraron que "en principio, no habría problema para votar a favor de las propuestas de los junteros". Sin embargo, a modo de ejemplo, los socialistas han votado en más de una ocasión contra el concierto económico en el Parlament de Catalunya. 

 

Diez años de empadronamiento para acceder a vivienda pública

Asimismo, los junteros también centran el debate de política general que arranca este martes con la intervención del president Illa en solucionar los "problemas de los catalanes". Más allá de las propuestas clave para la relación entre Junts per Catalunya y el PSOE, el grupo parlamentario presidido por Albert Batet también lleva varias propuestas en materia fiscal, educativa o sobre el catalán. En materia de vivienda, propone que se restablezca el requisito de un mínimo de diez años de empadronamiento en el municipio, de forma continua o discontinua, para poder acceder a una vivienda de protección oficial, tal como proponía el Ayuntamiento de Sant Cugat del Vallès liderado por Josep Maria Vallès. Asimismo, los junteros también proponen una inversión de 1.100 millones de euros anuales en materia de vivienda para "incentivar la inversión pública y privada".

Deflactación del IRPF, supresión del impuesto de sucesiones y rechazo a la OPA al Sabadell

La portavoz parlamentaria de Junts también ha explicado propuestas en materia fiscal: propondrá bajar el impuesto del IRPF y la supresión del impuesto de sucesiones, con la bonificación del 99%, tal como reclamaba el exconsejero de Economía Jaume Giró. A su vez, los de Junts también apuestan por “revisar y actualizar la eficiencia, eficacia y la justicia” de los impuestos propios de la Generalitat “con el objetivo de aligerar la presión fiscal a las rentas medias y bajas y reforzar la capacidad adquisitiva de los hogares catalanes”. El objetivo es “proteger especialmente a la clase media y trabajadora y a los colectivos más vulnerables, con un sistema que sea progresivo”. También ha destacado la propuesta de resolución que recoge la necesidad de suspender cualquier validación definitiva de los efectos de la OPA del BBVA y a establecer el requisito de que la operación hostil solo pueda prosperar si cuenta con el apoyo de al menos el 50% del capital social del Banco Sabadell.

Que los migrantes demuestren conocimiento de catalán para regularizar su situación

En cuanto a la lengua, Junts reclamará que el Govern reforme el reglamento de extranjería para que la "población inmigrante" deba "demostrar el conocimiento de la lengua catalana" para "regularizar su situación administrativa". Así lo ha adelantado la portavoz del grupo parlamentario, Mònica Sales, que ha señalado que se quiere requerir el nivel A2 al cabo de dos años de residencia y el B2 al cabo de 5 años. Junts pone sobre la mesa la necesidad de celebrar un debate específico en el Parlament para abordar soluciones a la situación del catalán y que el Govern haga cumplir las normativas existentes para garantizar que todos los ciudadanos puedan vivir plenamente en catalán y a crear la Oficina de Protección de los Derechos Lingüísticos antes de que acabe el año.

Exigencia del catalán a los sanitarios y eliminar el distrito único universitario

En el ámbito de la salud, el grupo pide "garantizar la equidad de acceso a los jóvenes" catalanes que quieren estudiar medicina, con la eliminación del distrito universitario único del Estado español o, como mínimo, la reserva del 80% de las plazas para estudiantes de institutos catalanes. Los miembros de Junts reclaman el traspaso de manera inmediata de las competencias para la homologación de los títulos de especialistas extracomunitarios para evitar el actual colapso. En esta línea, Junts per Catalunya propone que todos los profesionales del sistema sanitario catalán acrediten un certificado de B2 de catalán un año después de empezar a trabajar y uno de C1 al cabo de dos años.