El Seat Tarraco ha sido la última aventura de la marca española en el terreno de los SUV, un tipo de carrocerías que se está imponiendo en el mercado europeo. Eso sí, a diferencia de lo que ocurre especialmente con el Arona, el modelo más vendido de Seat, así como con el Ateca, uno de los modelos más exitosos de la marca española, el Tarraco no está teniendo precisamente el éxito que muchos esperaban en el fabricante.
Cabe tener en cuenta que nuestro mercado este tipo de modelos de grandes dimensiones nunca han tenido una cuota de mercado enorme, incluso antes de que llegar de los SUV. Las berlinas grandes dimensiones son los monovolúmenes de grandes dimensiones estaban reservadas para familias numerosas y, por lo tanto, su cuota de mercado de la muy menor.
Sin embargo, sí que hay un pequeño segmento en nuestro país que ha gozado siempre de una cuota de mercado muy fija y que apenas ha variado con los años: el de los todoterreno de grandes dimensiones. Y es ahí donde llega de nuevo uno de los peores rivales del Seat Tarraco por tamaño, que no por concepto de coche: el Toyota Land Cruiser.
El Toyota Land Cruiser sigue siendo la referencia
Si bien es cierto que Toyota cuenta ya con el Highlander como su SUV de grandes dimensiones y con capacidad de hasta siete plazas, el Land Cruiser sigue siendo la referencia entre aquellos que buscar un todo terreno puro.
Entre otras cosas porque este modelo, más allá de no contar seguramente con un diseño tan atractivo como el que cuentan los otros modelos de la gama de Toyota, está pensado para aquellos amantes del off road de verdad, no para familias que buscan un SUV con el que alejarse muy de vez en cuando del asfalto.
De hecho, cuenta con un motor de serie 204 caballos de potencia que, evidentemente, está asociado a una tracción a las cuatro ruedas así como pequeñas modificaciones que convierten a este Toyota en un todoterreno capaz de desplazarse por los terrenos más complicados sin ningún tipo de problema.
No cuenta ni con el mejor diseño exterior ni interior ni con lo último en tecnología de la marca, pero es que tampoco es precisamente su función, no es un modelo dirigido a los que busquen eso, si no es que quieran vivir experiencias diferentes al volante. Eso sí, tal y como podemos ver en que coche me compro.com, no es que sea precisamente un modelo barato.
Y es que su versión de serie supera los 50.000 €, un precio que, eso sí, teniendo en cuenta la fiabilidad y las prestaciones de este modelo, acaban haciendo de él una de las referencias en su segmento desde hace ya muchos años.