Viendo las cifras de ventas que está logrando Dacia en los últimos años tanto en España como en Europa, especialmente gracias al brutal éxito que está teniendo su Sandero, el modelo más vendido tanto en nuestro país como en el mercado del viejo continente en el pasado 2024, es más que evidente que la marca rumana se ha convertido en toda una referencia.
Un fabricante que está viviendo seguramente su mejor momento comercial desde que llegó a la inmensa mayoría de mercados en Europa fruto, entre otras cosas, del encarecimiento general de los precios de los coches y, además, de la pérdida de poder adquisitivo de buena parte de conductores que hasta hace muy poco no querían saber nada de una marca low cost pero que ahora, ya sea por necesidad o por qué no quieren pagar ciertos precios, ven a fabricantes como Dacia opciones realmente interesantes.
Pero el problema que tiene este fabricante en concreto es que, por mucho que sea la referencia en cuanto a ventas en Europa, son varios los fabricantes que están empezando a poner contra las cuerdas algunos de sus modelos, especialmente marcas que llegan desde China con productos muy interesantes en cuanto a relación calidad precio y que están logrando cada vez mejores cifras de ventas.
Omoda es un problema para Dacia
Un buen ejemplo de ello es MG, aunque cabe destacar que precisamente es otra marca china que cuenta con una oferta mucho más limitada pero con un modelo cada vez más exitoso la que, al menos a ojos de Dacia, se convierte en uno de sus rivales más directos: Omoda.
En este caso estamos ante un fabricante que ha pasado la inmensa mayoría de sus ventas hasta ahora en único modelo, el Omoda 5, un SUV tiene un precio muy similar al que tienen opciones de Dacia como es el caso Duster o el Bigster pero que llega mejor dotado en todos los sentidos y que, sobre todo, tiene un estatus muy superior al de los modelos de la marca low-cost rumana, siendo un modelo que incluso muchos conductores no consideran un low-cost sino un modelo generalista, algo lógico teniendo en cuenta lo bien dotado que llega en muchos sentidos.
Es evidente, y positivo en este caso para Dacia, que la marca asociada a Renault sigue teniendo mucho margen respecto a este tipo de marcas chinas, pero también lo es que en el fabricante sabe muy bien que la ampliación de oferta y de productos que están llevando a cabo este tipo de marcas puede acabar suponiendo un problema muy serio en su caso.