La Unión Europea contabilizaba 450,4 millones de habitantes en fecha de 1 de enero de 2025, un millón más que el año anterior, según ha publicado el servicio estadístico europeo Eurostat. La población de la Unión Europea sigue con una tendencia de crecimiento que solo frenó la pandemia de la Covid-19, cuando la población se cayó en casi un millón de personas. La oficina estadística de la UE atribuye el crecimiento al aumento de los movimientos migratorios hacia la Unión, en un contexto en el cual el crecimiento natural de la población es negativo.

La población de la Unión Europea sigue con una tendencia de crecimiento solo frenada a raíz de la mortalidad provocada por la pandemia de la Covid-19, según publica Eurostat este viernes. El ritmo de crecimiento desde el 2005, con una media de 0,9 millones de personas el año, es más lento que a la década de los años 60, donde la cifra superaba los 3 millones. El año 2021 la población descendió a causa de los efectos de la pandemia y, desde entonces, la cifra ha aumentado cuatro años consecutivos hasta contabilizar a 450,4 millones de personas a principios del año en curso.

Las variaciones de población se producen con la medida de dos indicadores: la migración neta, es decir, la diferencia entre personas que inmigran a un país y las que emigran, que puede ser tanto negativa como positiva; y el crecimiento natural, es decir, la diferencia en un país entre muertos|muertes y nacimientos, que también puede ser negativo, cuando mueren más de las que nacen, o positivo, cuando nacen más personas de las que mueren. Desde el año 2012, la diferencia positiva en los movimientos migratorios compensa el hecho que se registran más muertes que nacimientos dentro de la UE, excepto en el caso del 2021, cuando la inmigración no pudo compensar el exceso de mortandad producido por la pandemia.

¿En qué países crece la población y en cuáles baja?

Por países, en el último año la población ha crecido en 19 estados, mientras que ha disminuido en 8. Encabezan la lista de crecimiento demográfico, Malta (19%), Irlanda (16,3%) y Luxemburgo (14,7%), que junto con Chipre, Suecia y Francia, son los únicos países que han registrado variaciones positivas, tanto en el crecimiento natural como en la migración neta. Por el contrario, los 16 países restantes han crecido solo por los efectos de la migración, entre los cuales están España, Portugal, Bélgica, Austria o Grecia. Malta, con 18,7 inmigrantes por cada 1.000 personas, Portugal, con 13,4, Irlanda, con 12,8 y España, con 11,8, presentan las tasas de migración neta más elevadas de la Unión.

Por otra parte, de los 8 estados que han perdido población durante el 2024, Letonia (-9,9%), Hungría (-4,7%) y Polonia y Estonia, que comparten un -3,4%, son los estados que han sufrido una bajada de habitantes más acusada. Bulgaria, Italia, Rumania, Hungría, Polonia y Estonia presentaron un cambio positivo en la inmigración, pero que no fue capaz de compensar la bajada vegetativa de la población. Letonia es el único estado miembro de la Unión con tasas de migración y cambio natural negativas.