Al menos 290 personas murieron y alrededor de 500 resultaron heridas este domingo tras una serie de explosiones en al menos tres hoteles de lujo y dos iglesias en Sri Lanka, donde numerosos fieles celebraban el día de Domingo de Resurrección. Por ahora, 24 personas han sido detenidas en relación con la cadena de atentados.

Todas las explosiones ocurrieron hacia las 8.45 horas (2.30 GMT), en al menos tres hoteles de lujo en Colombo y también en un iglesia de la capital, otra en Batticaloa -ciudad situada en el este- y otra en Katana, en el oeste del país a unos 50 kilómetros al norte, informó el portavoz de la Policía de Sri Lanka, Ruwan Gunasekara. Fuentes hospitalarias aseguraron que sólo en el Hospital Nacional de Colombo habían recibido 25 cadáveres y 280 heridos.

"Por favor, permaneced en calma y dentro de las casas. Hay muchas víctimas, incluidos extranjeros", aseguró en Twitter el ministro de Sri Lanka para las Reformas Económicas y la Distribución Pública, Harsha de Silva, tras visitar varios de los lugares atacados.

De Silva señaló que habían convocado una reunión de emergencia y se mostró conmocionado por lo que había visto. "Escenas horribles. He visto miembros amputados esparcidos por todos lados. Equipos de emergencia están desplegados en su totalidad en todos los puntos. (...) Hemos llevado muchas víctimas al hospital, esperamos haber salvado muchas vidas", relató el ministro.

Imágenes difundidas por los medios locales muestran la magnitud de la explosión en al menos una de las iglesias, con el techo del templo semidestruido, escombros y cuerpos esparcidos mientras la gente trata de socorrerlos.

Horas después, una séptima explosión ha dejado al menos dos muertos más en un pequeño hotel de la ciudad de Dehiwela, muy cerca del zoo nacional del país. Posteriormente, todavía se ha producido una octava explosión en unas viviendas de la localidad de Colombo.

"Las explosiones en Dehiwala y Dematagoda parecen haber sido causadas por los que huyen de la justicia", ha afirmado el ministro para las Reformas Económicas y la Distribución Pública, Harsha de Silva, en la red social Twitter, en lo que parece una alusión a los autores de los ataques de hoy, aunque no ha dado más detalles.

Los fieles celebraban hoy el Domingo de Resurrección, el día más importante dentro de los ritos de la Semana Santa. Los ataques contra minorías religiosas en la isla se han venido repitiendo en el pasado, los últimos de relevancia en 2018, cuando el Gobierno tuvo que declarar el estado de emergencia después de se produjeran enfrentamientos entre musulmanes y cingaleses budistas con dos muertos y decenas de detenidos.

En Sri Lanka la población cristiana representa el 7%, mientras que los budistas son cerca del 70%, los hinduistas son el 15 % y los musulmanes el 11 %.