Cinco de los 24 barcos de la Flotilla Global Sumud, que finalmente este lunes salieron hacia Gaza, se han visto obligados a volver a Barcelona por seguridad a causa de las "condiciones meteorológicas extremas" que se dieron durante la noche del lunes, según ha informado la organización, que ha confirmado que volvieron por la noche y que todos los tripulantes están fuera de peligro y que la misión continúa. "Cuando los pequeños barcos civiles tienen que hacer el trabajo que los gobiernos no han hecho, navegando para romper el asedio y poner fin al genocidio, retos como estos son habituales", han afirmado. E insiste en que si los gobiernos "cómplices" enviaran sus barcos, esta responsabilidad no recaería sobre gente corriente". Con todo, han remarcado que "mantenemos nuestro compromiso de llegar a Gaza, de unirnos a los barcos que salen de Túnez, Grecia e Italia".
New 🚢 ✍️: The Steering Committee of the Global Sumud Flotilla Releases Statement on Weather Delays and the Steadfastness of the Convoy's Mission and Crews:
— Drop Site (@DropSiteNews) September 2, 2025
"Due to extreme weather conditions last night, five of our smaller vessels turned back for safety reasons. We are relieved… pic.twitter.com/b36yGRUAM7
Travesía accidentada
La flotilla salió por primera vez del puerto de Barcelona la tarde de domingo ante 5.000 personas que los despedían desde el Moll de la Fusta, después de dos jornadas de actividades y debates en que se ha denunciado reiteradamente la "complicidad" y el "silencio" de la comunidad internacional ante el "genocidio" de Israel en Gaza. "Barcelona nunca falla", celebró la exalcaldesa Ada Colau, una de las integrantes de la expedición. Finalmente, la flotilla se vio obligada a volver aquella misma noche a consecuencia de las malas condiciones meteorológicas. Los responsables de la expedición humanitaria —donde viajan la activista sueca Greta Thunberg o Colau— decidieron desviarse por la previsión de tormentas y una fuerte tramontana en el mar. En un comunicado, los responsables de la iniciativa explicaron que a causa de unas condiciones meteorológicas "peligrosas" hicieron una "prueba de mar" y después volvieron a puerto para dejar pasar la tormenta. Esto implicó "atrasar" la salida para "evitar complicaciones con las embarcaciones más pequeñas". La prueba del primer intento sirvió para constatar que las embarcaciones se enfrentaban a vientos "de más de 30 nudos". Esto, y la "imprevisibilidad del Mediterráneo", hizo tomar la decisión de abortar la primera salida para "priorizar la seguridad y el bienestar" de los integrantes de la expedición.

Los capitanes se reunieron este lunes a las 10.00 horas y decidieron salir por la tarde ante la mejora de las condiciones climatológicas. Al poco de las ocho de la tarde retomaron la travesía hacia Gaza. El regidor de ERC por Barcelona, Jordi Coronas, no ha salido hacia Gaza con la embarcación Bribón, tal como estaba previsto, porque a raíz de la salida fallida de ayer se ha creído que la nave no podría afrontar con garantías la travesía de 14 días hasta Gaza. En lugar de esto, Coronas ejercerá de capitán de otro barco de dimensiones superiores llamado Adara, que tiene una tripulación de unas treinta personas.
Saif Abukeshek, portavoz de la Global Sumud Flotilla, explicaba que las primeras horas de expedición se habían aprovechado para que los integrantes de los barcos tuvieran "contacto con el mar". "Tenemos muchas ganas y la determinación de siempre y continuamos el camino sin ningún cambio de planes", afirmaba Abukeshek. Esta será la cuarta expedición que intentará llegar a Gaza, puesto que los otros intentos han sido frenados en aguas internacionales. En este sentido, el activista y organizador de la Flotilla, Thiago Ávila, que ya fue en una embarcación hace unos meses, ha augurado que ahora no los pararán. Los organizadores han detallado que unas cuarenta nacionalidades se han sumado a la misión y que cuentan con unas 300 personas implicadas.