Incluir una pequeña porción de chocolate negro en tu dieta diaria puede ser más beneficioso de lo que parece. Aunque muchas veces el chocolate se asocia con un capricho poco saludable, diversos estudios recientes apuntan a que el consumo moderado de chocolate con alto contenido en cacao podría tener un efecto positivo sobre la presión arterial, especialmente en personas que presentan cifras elevadas o en el límite de lo considerado normal. El secreto está en los flavanoles, unos compuestos naturales presentes en el cacao. Estos antioxidantes, y en particular uno llamado epicatequina, ayudan a mejorar la salud de los vasos sanguíneos al favorecer la producción de óxido nítrico, una molécula que provoca que las arterias se relajen y se dilaten.
Esto pasa con tu presión arterial si comes chocolate negro
Este efecto hace que la presión ejercida por la sangre sobre las paredes arteriales disminuya de manera moderada, pero significativa. Según las investigaciones, tras consumir chocolate negro durante entre dos y cuatro semanas, la presión sistólica, el número superior, puede bajar entre 2 y 4 mmHg, mientras que la presión diastólica, el número inferior, puede reducirse de 1 a 2 mmHg. Aunque estos descensos parezcan pequeños, a largo plazo pueden reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, como infartos o accidentes cerebrovasculares.

Eso sí, no todos los chocolates valen. Para que se produzcan estos beneficios es necesario que el chocolate tenga al menos un 70% de cacao, ya que es ahí donde se concentran los flavanoles. Las versiones con menos cacao o el chocolate con leche apenas contienen estos compuestos, y suelen tener además más azúcares añadidos, lo que anula cualquier efecto positivo. La cantidad también importa: lo ideal es consumir entre 6 y 25 gramos al día, lo que equivaldría a uno o dos cuadraditos de una tableta estándar.
Es necesario que el chocolate tenga al menos un 70% de cacao
En general, comer chocolate negro con moderación es seguro, pero hay algunos aspectos que conviene tener en cuenta. Este tipo de chocolate contiene algo de cafeína, por lo que puede no ser recomendable tomarlo por la noche si eres sensible a este estimulante. Además, algunas personas con problemas como migrañas o reflujo gástrico pueden notar que el chocolate actúa como desencadenante de sus síntomas. Y, aunque contenga menos azúcar que otros tipos, sigue siendo importante controlar las porciones.

Como con cualquier cambio en la alimentación, si tienes problemas de salud o tomas medicación, es aconsejable consultar antes con un profesional. Pero en líneas generales, incluir un poco de chocolate negro a diario puede ser una forma deliciosa y natural de cuidar tu presión arterial.