A todos nos ha pasado alguna vez: dejas el arroz en el fuego unos minutos de más y, cuando te das cuenta, parte del fondo se ha quemado. Aunque de primeras parece que el plato está perdido, desde la cuenta de Instagram @foodiescuela nos enseñan que aún hay solución. Según explican, cuando ocurre este accidente en la cocina, no todo el arroz debe ir directo a la basura. De hecho, alrededor de un 70% del arroz puede salvarse perfectamente, siempre y cuando tengamos cuidado de no rascar ni mezclar la parte quemada.
Cómo aprovechar el arroz si se ha quemado
La clave está en separar con delicadeza el arroz de la capa que ha quedado pegada al fondo. El arroz que se encuentra encima, aunque haya tomado un ligero sabor a tostado, no está quemado y puede tener un toque ahumado muy interesante si sabemos cómo aprovecharlo. De esta forma, no solo evitamos desperdiciar comida, sino que también transformamos un pequeño error en una oportunidad de preparar platos distintos y llenos de personalidad.

Desde @foodiescuela nos proponen varias ideas para reutilizar este arroz de manera creativa. Una de las mejores opciones es convertirlo en arroz frito o arroz chino. Estos platos, conocidos por su versatilidad y riqueza de sabores, aceptan perfectamente un toque ahumado. El ligero tostado del arroz no solo no desentona, sino que se integra a la perfección con ingredientes como la salsa de soja, el aceite de sésamo, las verduras salteadas o incluso el pollo y el huevo. Además, el sabor ahumado que puede quedar en el arroz le da un matiz especial a las recetas de inspiración asiática, donde los contrastes de sabores suelen ser muy apreciados. Por ejemplo, un arroz salteado con zanahoria, cebolla, guisantes, un chorrito de salsa de soja y un poco de sésamo tostado puede convertirse en un plato delicioso en pocos minutos. Y todo gracias a un arroz que, en un primer momento, pensábamos tirar.
El sabor ahumado que puede quedar en el arroz le da un matiz especial a las recetas de inspiración asiática
Eso sí, es importante recordar que la parte realmente quemada, la que está negra y pegada al fondo de la olla, no debe utilizarse bajo ningún concepto, ya que no solo tiene un sabor muy desagradable, sino que tampoco es buena para la salud. Con un poco de práctica y rapidez, podemos rescatar la mayor parte del arroz y darle una nueva vida en la cocina.
Así que ya sabes: la próxima vez que se te pase el arroz, no te desesperes. Con un toque de creatividad, puedes convertir el error en un plato increíblemente sabroso.