El futuro de David Alaba en el Real Madrid ya está completamente sentenciado. El técnico, Xabi Alonso, le ha trasladado personalmente al defensor austríaco que no volverá a vestirse de corto con la camiseta blanca. La decisión, aunque dura, responde a una realidad deportiva innegable que demuestra que Alaba está muy lejos del nivel que ofrecía antes de su grave lesión de rodilla y, según el cuerpo técnico blanco, ya no puede competir al ritmo que exige el proyecto del conjunto merengue.
Alaba no está para el ritmo del Real Madrid
Y es que Alaba arrastra desde hace varias temporadas un cúmulo de problemas físicos que le han impedido recuperar su explosividad, su velocidad en anticipaciones y su capacidad de intervenir en la emergencia. Cada intento de regreso ha mostrado la misma pauta: sensaciones pobres, inseguridad defensiva y una evidente falta de frescura. Para Xabi Alonso, que está decidido a rejuvenecer la plantilla y elevar el nivel competitivo del equipo, su situación es muy clara. El defensa se ha quedado por detrás de todos los centrales en las rotaciones, y el entrenador no lo ve preparado ni para asumir minutos en la Copa del Rey, algo que en Valdebebas ya se interpreta como un mensaje definitivo.
De este modo, el técnico considera que insistir en una recuperación que no llega solo generaría frustración y alimentaría un problema interno que él no quiere prolongar. No existe ningún conflicto personal, pero sí una convicción profesional: Alaba, hoy por hoy, no está para jugar en un equipo que aspira a todos los títulos. La exigencia del Real Madrid es máxima, y el austríaco no puede mantenerse a la altura de sus compañeros.
El club busca una salida respetuosa y la MLS gana fuerza
La realidad es que Alaba ya ha disputado su último partido con el Real Madrid. El jugador lo sabe, el cuerpo técnico también y la directiva comparte la idea de cerrar una salida amistosa en el mercado de invierno. En el club se considera que lo más adecuado es facilitarle un destino donde pueda seguir compitiendo sin la presión extrema del fútbol europeo y donde sus condiciones físicas puedan gestionarse con mayor tranquilidad.
La MLS se ha posicionado como la opción más probable. Varios equipos han mostrado interés en incorporarlo, valorando su experiencia, su liderazgo y su capacidad para reforzar proyectos en crecimiento. El propio jugador vería con buenos ojos este movimiento, tanto a nivel deportivo como personal, entendiendo que sería una oportunidad para prolongar su carrera sin el desgaste que supone jugar en la élite europea.
Así pues, la etapa de David Alaba en el Real Madrid llega a su fin sin polémicas, pero con la sensación de un ciclo que se ha agotado prematuramente. Para Xabi Alonso, la decisión está tomada. Para el club, es el momento adecuado. Y para el jugador, quizá sea la última ocasión de reencontrarse con su fútbol antes de que sea demasiado tarde.