El Reial Madrid se impuso al Barça en el primer Clásico de la temporada. Los blancos derrotaron por la mínima a un Barça lleno de bajas y sin Hansi Flick en el banquillo, castigado después de una expulsión muy discutida contra el Girona. Los culés no hicieron un buen partido: estuvieron espesos, lentos y previsibles con la pelota. Aun así, los blancos, sin apenas bajas y con un Kylian Mbappé en un gran estado de forma, ganaron por solo un gol de diferencia. Además, esta victoria estuvo marcada por la actuación arbitral de Soto Grado, que, entre otras acciones, no vio —o no quiso hacerlo— un penalti de Carvajal sobre Ronald Araujo en los minutos finales.

El evidente cambio de criterio de Mateu Lahoz
Tal como se vio en las imágenes, Carvajal, sin ninguna intención de disputar la pelota, cargó directamente contra la espalda de Araújo. El uruguayo, debido al contacto evidente, cayó al suelo, pero ni Soto Grado ni el VAR consideraron que la acción fuera penalti. Una decisión sorprendente, teniendo en cuenta que, según el reglamento, las cargas solo son legales cuando se producen hombro con hombro, y no como en esta acción de Carvajal. La jugada generó un gran revuelo en las redes sociales y en los medios de comunicación. En la Cadena Cope, el exárbitro Mateu Lahoz lo tuvo claro: “Asume un riesgo porque le empuja por la espalda". Además, añadió que si la acción no se hubiera producido en un Clásico y hubiera pasado en cualquier otro partido, se habría pitado penalti.
A pesar de la claridad con la que Mateu Lahoz había valorado inicialmente la acción, esta determinación desapareció cuando analizó la jugada en el programa El Día Después de Movistar+. En esta ocasión, el exárbitro matizó su opinión y aseguró que la acción no era penalizable: “Un momento de fútbol: el balón formaba parte de la acción y el contacto era natural entre la espalda y el hombro, motivo por el cual el jugador no fue sancionado”, afirmó.

La diferencia de criterios con la acción de Carvajal
No es la primera vez que Carvajal realiza este tipo de cargas ilegales que no son sancionadas. De hecho, es una práctica habitual en su juego. Lo que sorprende es la diferencia de criterio aplicada en situaciones similares. Por ejemplo, esta misma temporada, en un partido entre el Elche y el Athletic Club, André Silva hizo una carga parecida sobre Vivian. El central vasco, desequilibrado, tocó el balón con la mano y el árbitro señaló expulsión para Vivian, que era el último jugador. El VAR intervino correctamente y sancionó la falta del delantero.
Otro ejemplo es el partido de Inglaterra contra Francia del Mundial de 2022, cuando el defensa Theo Hernández hizo una carga similar sobre Mason Mount. En este caso, el VAR intervino y se señaló penalti. La pregunta es evidente: ¿por qué en la acción de Carvajal no sucedió lo mismo? Esta incoherencia vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre la interpretación de las normas y su aplicación en función del contexto o de cuáles son los equipos implicados.