Rafa Nadal habla con claridad. El balear es de aquellos que prefiere hablar más en el campo que delante de una cámara o un micrófono, pero cuando lo hace no se esconde de nada. En una entrevista en el canal Vamos de Movistar+ ha repasado la actualidad del tenis, la Copa Davis impulsada por Gerard Piqué y el desastre natural que estuvo en Mallorca el octubre pasado.
"Se tiene que dejar de decir la Davis de Piqué", ha asegurado Nadal. El tenista tiene una relación "estupenda" con el azulgrana, pero que al final es la Copa Davis sin nombres añadidos. El manacorense ha querido agradecer el trabajo del central catalán por interesarse en un deporte como es el tenis y ha cargado contra el antiguo formato porque los "mejores jugadores no podían estar por el calendario que tenían".
Las inundaciones en Sant Llorenç (Mallorca) dejaron el balance de 12 muertos
El octubre pasado ocurrió uno de los peores desastres naturales de los últimos tiempos en Mallorca. Murieron 12 personas por las inundaciones que hubo en Sant Llorenç por las fuertes lluvias y aquellos días Nadal los vivió con "tristeza". Toda la familia por parte de madre viven en esta localidad y el primero que hizo el tenista fue comprobar que estaban bien.
EFE
Nadal le tocó de muy cerca las inundaciones y de alguna manera u otra quería ayudar. Es por eso que fue con sus amigos con una pala en la mano a ayudar a sacar agua de las casas. Los medios de comunicación lo captaron y las fotografías dieron la vuelta al mundo. Sin embargo, el balear ha afirmado que no le molestó que se publicaran estas imágenes.
Intentaba que el desastre a su tierra no lo afectara demasiado y al día siguiente fue a entrenar. Quince minutos después no podía seguir: "Chicos, no tengo ganas de entrenar, quiero ver cómo está la gente".
Este 2018 de Rafa Nadal ha estado marcado por unas lesiones que le han impedido poder participar en todos los torneos que querría y es por eso que ha explicado que "no estoy contento de como acabado el año". De las nueve competiciones ganó cinco, pero las lesiones le hicieron pasar por "momentos difíciles".
Nadal se siente tenista al 100% y no se plantea cuándo será el final. Es feliz haciendo lo que más le gusta, pero cuando llegue el día que lo tenga que dejar, "no tiene nada de miedo". "La vida no se acaba en el tenis. Cuando llegue, llegará y lo sabré. Este momento no ha llegado". El balear se siente un privilegiado y es que ha hecho de su hobbie su trabajo. Nadal quiere seguir haciendo historia.