Gregg Popovich empieza a desplegar su repertorio al frente de la selección de baloncesto de los Estados Unidos. El veterano entrenador de los San Antonio Spurs ha empezado a dirigir el Dream Team motivando a las estrellas con un incentivo: un coche.

Popovich habló con los jugadores, concentrados estos días con la selección, antes de empezar diferentes concursos de habilidad y les hizo una promesa. El ganador tendría un coche nuevo como premio. Pero no dijo qué tipo de coche.

James Harden, actual MVP de la NBA y escolta de los Houston Rockets, ganó el concurso y no dudó a la hora de enseñar el premio: un coche amarillo de juguete. Harden, sin embargo, no tendrá problemas para comprarse un coche nuevo con los 26 millones de euros que cobrará la próxima temporada.

"Puse la bolsa [con los juguetes] delante de los jugadores. No podían parar de reír. Pensaron que era divertido. Sólo quería tomarles el pelo", ha dicho un Popovich que hace más grande la leyenda sobre sus métodos de entrenamiento.