Los dos campeones de diez de las últimas once ediciones del Open Banc Sabadell, Rafa Nadal y Kei Nishikori, están a una victoria de programar la final soñada del torneo del RCT Barcelona. Nadal se clasificó para las semifinales por novena vez en su historia. El ocho veces campeón del Trofeo Godó le tenía muchas ganas a su rival, el italiano Fabio Fognini. Se desquitó. Lo venció por 6-2 y 7-6 (1) en 1 hora y 50 minutos. El paso a la final lo buscará Nadal ante Philipp Kohlschreiber. La otra semifinal la disputarán el doble campeón del torneo, Nei Nishikori, y Benoit Paire.

Entre el 2013 y el 2014, Fabio Fognini no le había ganado a Nadal nunca. Acumulaba cuatro derrotas y sólo había podido conseguir un set. Pero en el 2015, el italiano aprovechó al máximo el bajón de juego que tuvo el español. Se enfrentó con él cinco veces y lo venció en tres ocasiones, una de ellas en los cuartos de final de Barcelona. Pero la más sangrante, la que más dolió a Nadal fue la del US Open, en la tercera ronda y en cinco sets, después de ir abajo 1-2. Aquel día Nadal no entendió nada. Salió cabizbajo. No era su temporada.

Cobrar una deuda

Pero los campeones, aunque nunca lo digan, tienen heridas, a las que también se podían llamar deudas que cobrar. No olvidan. Tienen memoria y saben bien quién se las debe. Fognini era un deudor en la cuenta de Nadal. Quizás por eso, y porque está creciendo, porque se siente como nuevo, porque está viendo la salida del túnel, y porque, en verdad, está mucho mejor que el año pasado, Nadal salió a cobrar la factura.

Y fue un vendaval. A Fognini, convaleciente de una lesión abdominal, le cayó un chaparrón de entrada: 4-0, en apenas 19 minutos. Después pudo maquillar un poco el resultado y ganó dos juegos. Pero estaba visto que ese partido tenía que cuidarse más de no ser maltratado por un Nadal que le tenía muchas ganas.

Ataque al abdominal tocado

Como si supiera qué lado de los abdominales era el que había apartado a Fognini de las pistas, Nadal centró su artillería en el revés del italiano, casualmente el mismo golpe con el que Fognini hizo más daño el año pasado al número uno español. Y ahí dolía, y por ahí llegaron la mayoría de puntos y la mayoría de errores de Fognini.

El segundo set tuvo el mismo comienzo del primero. Nadal pareció que no quería quitar el pie del acelerador y ganó los dos primeros juegos. Parecía que esta película ya estaba en su final. Pero no. Fognini echó el resto. Quiso decir algo. Por lo menos que las otras veces que venció a Nadal lo hizo también por sus propios méritos y no sólo porque el manacorí estaba en baja forma. Del 0-2, el italiano pasó a 4-2. Nadie le había hecho cuatro juegos seguidos a Nadal en este torneo. Nadie tampoco lo había aventajado en un set con tanta diferencia.

Un tie-break imponente

Fognini, que tuvo un 3-5, sacó para igualar el partido con 4-5, pero Nadal creció y atacó con más convicción, tirando a las líneas, golpeando con todo, con el alma y el corazón, y acabó desquitándose del parcial de 0-4, pero no pudo evitar definir en el tie-break, donde se impuso por un claro 6-1 jugando de forma imponente. Si de algo se puede acusar al italiano es que abusó de la dejada, algo que, según el maestro Andrés Gimeno, sólo debe servir de recurso y no como arma fija. Y menos contra Nadal.

Nishikori salva dos set-balls

La suerte estuvo del lado del doble defensor del título, el japonés Kei Nishikori, que en el duelo con su amigo y con el que ha estado entrenándose toda la semana, Alexandr Dolgopolov, estuvo contra las cuerdas.

Todo lo interesante que sucedió en el encuentro ocurrió en el primer set. El ucraniano, 30 del mundo y que nunca ha vencido a Nishikori, ni siquiera le ha ganado un set en sus cuatro anteriores enfrentamientos, llegó a gozar de una ventaja de 5-4 y cuatro pelotas de set. El saque, la constancia y la fortaleza mental de Nishikori acabó superando el peor momento que ha pasado en las tres ediciones que ha disputado el torneo. Después ya no hubo color. El japonés ganó nueve juegos seguidos: 7-5 y 6-0.

Nishikori se enfrentará al francés Benoit Paire, 22 del mundo, invitado del torneo y sexto cabeza de serie, que en su primer enfrentamiento con el tunecino Malek Jaziri tuvo que remontar un primer set para acabar venciendo por 3-6, 7-5 y 6-1.