El pívot nigeriano Michael Ojo, muerto el viernes pasado a los 27 años de un ataque al corazón, había dado positivo por coronavirus el pasado mes de junio. Así lo ha confirmado el Estrella Roja de Belgrado, club en el qual militó hasta hace seis semanas.

"Queremos, por principios morales, que se sepa con exactitud qué ha pasado con él", ha empezado diciendo el presidente del equipo, Nebojsa Covic, en declaraciones en la cadena Sportklub, en qué confirmó que el jugador dio positivo por Covid-19. Covic ha explicado que tanto la familia del jugador como la embajada nigeriana en Serbia han pedido aclarar las circunstancias de la muerte de Ojo, con el trasfondo de la pandemia.

El pívot, de 2,16 metros y 140 kg, jugador del Estrella Roja hasta el 30 de junio pasado, murió el viernes pasado en Belgrado de un ataque cardiaco durante un entrenamiento individual. Covic ha añadido que el Estrella Roja ha podido saber que entre finales de junio y comienzos de julio Ojo empezó a sentir dolores en el pulmón, fiebre y tos, y dio positivo por coronavirus.

El 6 de julio le fue diagnosticada una neumonía en el pulmón derecho, pero el jugador se negó a ser tratado en una clínica especializada en enfermedades infecciosas y prefirió recibir tratamientos en un centro privado. Una semana después se le diagnosticó un comienzo de neumonía en el otro pulmón y los análisis de sangre revelaron valores anormales. Durante los siguientes días fue sometido a más controles que no dieron señales de mejora, pero el 6 de agosto una nueva prueba mostró que la neumonía había desaparecido y había la presencia de anticuerpos, señal que indicaba que había superado la Covid-19.

Según Covic, Ojo no recibió la autorización de los médicos de entrenar, sino "la recomendación de realizar actividad física de intensidad moderada", hasta que se recuperara totalmente. No obstante, el jugador se sometió a cuatro entrenamientos entre el 31 de julio y el 7 de agosto, día de su muerte. Covic explica que el pívot había explicado a los médicos que se sentía muy cansado.

Ahora mismo la fiscalía serbia está investigando el caso y el cadáver de Ojo será sometido a un nuevo test de coronavirus.