Todas las personas a lo largo de su vida han intentado en alguna ocasión generar un cambio en su vida. Este cambio puede ser un cambio personal, como dejar de fumar o profesional, como por ejemplo trabajar para conseguir un ascenso.
No obstante, es un hecho que los cambios provocan temor y que este temor a salir de nuestra zona de confort puede hacer que nosotros mismos trunquemos nuestros intentos de éxito. Esquivar estos intentos no es sencillo pero a lo largo de este artículo se muestran varias claves para combatir el autosabotaje.
Una de las técnicas más efectivas a la hora de enfrentarse a grandes cambios en nuestra vida es la de intentar mantener una estabilidad tanto a nivel mental, físico como emocional
La importancia del autoconcepto
Es común que aquellas personas que durante su infancia y adolescencia desarrollaran un gran autopercepción de fracaso o mediocridad encuentren más dificultades a la hora de conseguir sus objetivos o sus sueños. No obstante, esta percepción de uno mismo se puede transformar e invertir si la persona está dispuesta a ello.
Existen cientos de maneras de sabotearse a uno mismo, desde pequeñas conductas prácticamente inconscientes hasta comportamientos significativos con los que la persona sabe de antemano que está frustrando sus intentos de conseguir algo. Algunas de las manifestaciones más reconocibles de que una persona está autosaboteándose son:
- Poner la falta de tiempo como excusa para no realizar aquello que le gustaría pero que le da miedo.
- Anteponiendo continuamente tareas menos relevantes o con consecuencias menos temidas.
- Sustituir con conductas de recompensa inmediata para no enfrentarse al problema.
Sin embargo, todos nosotros podemos comenzar a llevar a cabo una serie de buenos hábitos que le impidan recaer en el autosabotaje. Algunos de estos hábitos consisten en:
1. Estar convencido de que es posible
Tal y como se comenta a lo largo del artículo, las creencias acerca de nosotros mismos determinan nuestra percepción de todo aquello que hagamos. De esta forma, si creemos de antemano que no vamos a conseguir algo o creemos que no vamos a estar a la altura seguramente esto acabe sucediendo.
Por lo tanto, el primer paso para evitar el autosabotaje es empezar a cambiar nuestras creencias y, poco a poco, comenzar a creer que sí podemos conseguirlo.
2. Trabajar la motivación
La mayoría de las veces las personas no llegan a ver sus proyectos o aspiraciones hechas realidad porque no poseen las técnicas o habilidades necesarias para trabajar y desarrollar su motivación. Por lo que muchas grandes intenciones o geniales ideas no llegan a ver la luz solamente por el hecho de que la motivación y el compromiso han ido descendiendo durante el trayecto.
3. Ir poco a poco
Por muy motivada que una persona empiece un proyecto si comienza de una forma muy intensa o intentado alcanzar objetivos enormes es muy probable que se canse más fácilmente, o incluso que llegue a experimentar sentimientos de frustración al no poder alcanzarlos.
4. Ser consciente de que no será un camino sencillo
Saber que tanto el camino que tenemos que recorrer como los cambios en nuestra vida que este pueda acarrear no van a ser fáciles nos prepara para poder enfrentarnos a ellos con mayor eficacia.
5. Encuentra un equilibrio
Una de las técnicas más efectivas a la hora de enfrentarse a grandes cambios en nuestra vida es la de intentar mantener una estabilidad tanto a nivel mental, físico como emocional. Si conseguimos mantener el equilibrio en estos tres planos nos encontraremos mucho más calmados y eliminaremos las posibles interferencias que puedan alterar el desarrollo de nuestro proyectos.
6. Conocer las influencias externas
Nuestro contexto social, entorno familiar y amigos pueden llegar a ejercer una gran influencia sobre nosotros, y esta no tiene el porqué de ser siempre buena. En muchas ocasiones nuestros intentos de cambio o de lograr un objetivo no llegan a verse realizados porque nuestro entorno los limita.