Los analistas tienen dudas de que la opa del BBVA sobre el Sabadell acabe triunfando. Creen que la oferta no es suficientemente atractiva: el precio es el mismo desde el inicio, hace 16 meses, a pesar de la fuerte subida del Sabadell en bolsa, y eso haría que los accionistas perdieran valor —casi un 10%. Además, creen en el recorrido de la entidad catalana en solitario. Por todo ello, consideran difícil que el BBVA consiga superar el umbral del 50% de las acciones.
Ahora bien, el banco que preside Carlos Torres se ha guardado un as en la manga. En el folleto de la opa se incluye la posibilidad de renunciar a ese 50% mínimo y rebajarlo hasta el 30%, una opción que la ley permite y que el BBVA ha solicitado a los reguladores. Torres ha asegurado que no es la intención, que quieren llegar al 50% para tener el control del Sabadell y que el hecho de que se incluya la opción de bajar al 30% en el folleto no significa que deba usarse. Pero nunca lo descarta del todo: “Lo normal es que no pase”, ha dicho esta semana en una entrevista radiofónica. Y en el folleto detalla la posibilidad de rebajarlo al 30%: plazos, condiciones, compromisos y proyecciones de cómo sería el banco resultante.
Lo cierto es que la opción de rebajarlo del 50 al 30% saldría muy cara al banco de origen vasco. De hecho, podría costarle hasta 11.000 millones de euros en efectivo, en el caso de mirar la horquilla más amplia de la operación. La ley permite rebajar el umbral mínimo, lo cual facilitaría mucho el éxito de la operación, pero al mismo tiempo es exigente en cuanto a las condiciones.
Tal como recoge el folleto de la opa, si el BBVA obtuviera entre el 30% y el 50% de las acciones de la entidad que preside Josep Oliu y decidiera no renunciar a la operación rebajando el umbral de aceptación —decisión que tendría que tomar inmediatamente después de conocer el resultado de la opa—, estaría obligado a presentar una nueva oferta por el 100% del banco. En este caso, tendría que ser en efectivo o, si fuera en acciones, debería incluir una alternativa en efectivo.
Los analistas ven difícil que el BBVA llegue al 50% del Sabadell con la opa si no sube el precio, pero Torres tiene un as en la manga
La oferta, para que tuviera éxito, tendría que ser atractiva, y, de hecho, el BBVA no podría poner la cifra que quisiera. El precio sería lo que se denomina un precio equitativo, que tendría que ser aceptado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Este precio equitativo, según la ley que lo regula, correspondería a la media del precio de la acción durante la opa, es decir, un precio muy similar al actual, por encima de los tres euros por acción.
Actualmente, el Sabadell vale más de 16.000 millones de euros en bolsa. Si con la opa el BBVA solo llegara al 30%, la oferta en efectivo se dirigiría al 70% restante, que si se aceptara en su totalidad, supondría un gasto superior a los 11.000 millones de euros en compra de acciones.
Este es un escenario máximo. También podría ser mucho inferior: por ejemplo, si el BBVA llegara al 49% del Sabadell y, con la nueva oferta, solo la aceptara un 10% de los accionistas, el gasto sería de unos 1.600 millones. Estos son cálculos hechos por ON ECONOMIA de acuerdo con la información del folleto y el decreto ley de opas y a partir de la cotización actual del Sabadell en bolsa. El BBVA asegura que pagaría una eventual oferta en efectivo con fondos propios, que le darían para un porcentaje modesto, pero difícilmente para el 70%.
Las condiciones para bajar al 30%
El BBVA, aunque insiste en que quiere llegar al 50% y no al 30%, como ha hecho Carlos Torres últimamente, o como dice la entidad en el folleto de la opa, no solo incluye la opción del 30%, sino que, además, se detallan condiciones, lo que indica que es una opción que sí está sobre la mesa.
La primera sería el número de acciones del Banc Sabadell que acepten la opa. No es lo mismo quedarse con un 30% y pico que rozar el 50%. En este segundo caso, sería más barato lanzar una opa posterior, porque se dirigiría a menos acciones, y, además, sería más aceptable social y políticamente.
El BBVA supedita la rebaja del umbral mínimo de la opa al 30% al porcentaje de acciones obtenido y al precio que deba pagar después
También dependerá del precio de la acción del Banc Sabadell que deba pagarse, así como de “la evolución de los negocios y de las condiciones macroeconómicas y de mercado en ese momento”, según dice el BBVA en el folleto.
La documentación enviada a la CNMV el pasado viernes también incluye cuáles serían los resultados del BBVA en el caso de comprar el 100% del Sabadell, el 50% y, adicionalmente, el 30%. En este último caso, los resultados del banco de origen vasco no mejorarían excesivamente. El año pasado habría ganado 10.600 millones en lugar de los 10.054. Por lo tanto, la diferencia no llegaría a los 550 millones de euros.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores aprobó el pasado viernes, 5 de septiembre, la opa, y desde este lunes, los accionistas del Sabadell que lo deseen, pueden vender sus acciones al BBVA. Tienen hasta el 7 de octubre para hacerlo. El banco oferente tiene hasta diez días antes de la finalización del período de aceptación para decidir si sube la oferta, algo que Torres ha reiterado que no hará, aunque siempre sería más barato, si fuera en efectivo, que la opa posterior.