El presidente del BBVA, Carlos Torres, ha cerrado la puerta a cualquier flexibilización de los términos de la OPA lanzada sobre el Banc Sabadell. En una intervención en Onda Cero, Torres se ha reafirmado en que la condición de alcanzar más del 50% de las acciones es innegociable y descarta renunciar a ese umbral, lo que automáticamente descarta una segunda oferta obligatoria. Asimismo, atribuye la prima negativa de la cotización del Sabadell a la "especulación" sobre un posible aumento de precio, algo que niega rotundamente.
Torres ha sido contundente al ser preguntado sobre la posibilidad de rebajar el mínimo de aceptación al 30%, una opción legal contemplada en el folleto. "No tenemos ninguna intención de retirar esa condición", ha afirmado en la emisora, recalcando que el control mayoritario es el objetivo que garantiza el éxito de la operación el "día después". De no lograrse este apoyo, la oferta "se declara fallida y se acabó la operación", sentencia, zanjando así las expectativas de una nueva OPA obligatoria. "Lo normal es que no se produzca", añade el dirigente bancario.
Respecto a la cotización del Sabadell, que se mantiene por encima del precio ofrecido por el BBVA, Torres lo vincula a "juegos de mercado que tienen que ver con la especulación". Critica las declaraciones del consejero delegado de Sabadell, César González-Bueno, quien sugirió en Nueva York que "era de sentido común" que esta no fuera la oferta final.
"Nosotros vemos que la oferta es enormemente atractiva y no vemos ninguna razón por la que cambiarla. Y, por tanto, no tenemos ninguna intención de hacerlo", replica el máximo responsable de BBVA. Argumenta que el precio al que se negocia actualmente Sabadell en el mercado es ilusorio para la totalidad del capital, ya que "una vez que los primeros vendieran, el precio colapsaría", mientras que la oferta de BBVA sí permite a todos los accionistas vender al precio establecido.
Torres anticipa que esta situación de divergencia de precios se resolverá cuando el mercado perciba que la oferta es definitiva e inamovible. Según explica el presidente del BBVA, aplicando la legislación más restrictiva, este punto de no retorno se alcanzaría unos diez días hábiles antes del cierre del periodo de aceptación, previsto para el 7 de octubre."A partir de ese momento, este juego desaparecerá y convergerán los dos precios", pronostica. Torres también ha recordado que la cotización de BBVA se encuentra en máximos históricos, comparable solo a los niveles de 2007, lo que a su juicio refuerza el atractivo de la oferta actual, que combina acciones de BBVA y un dividendo en efectivo de 0,70 euros por acción.
Por su parte, los principales analistas de los mercados financieros no ven nada clara la opa del BBVA sobre el Sabadell y recomiendan a los accionistas no aceptarla, a menos que el banco dirigido por Carlos Torres aumente el precio. "Recomendamos a los accionistas del Sabadell no aceptar la oferta del BBVA en las condiciones actuales", dice Bankinter, el más claro al respeto. Alantra emite el mismo consejo "a menos que haya una subida del 20-30%" en la oferta. Barclays es más moderado y ve que la opa "tiene sentido", pero cree que es "de aceptación incierta" sobre todo por los accionistas minoritarios particulares.