La ministra española de vivienda, Isabel Rodríguez, ha presentado este jueves el nuevo Plan Estatal de Vivienda y su forma de financiación. Las comunidades autónomas no estarán obligadas a cofinanciar el plan el año que viene, sino que pueden financiar la parte que les corresponde hasta 2030 conforme al 40% que deben aportar. En este contexto, el ministerio ha hecho público también cómo se repartirán los 7.000 millones a repartir hasta 2030: Catalunya es la tercera comunidad que más fondos recibirá, con 1.015 millones de euros, 473 millones más que en el anterior plan.

Se trata de la comunidad que menos crece en comparación con el plan 2022-2025, a pesar de que fue la única que aportó más del 40% de recursos propios a la convocatoria anterior.

Andalucía casi duplica los fondos que recibirá al recibir una asignación de 1.197 millones que supone 876 millones más que en el plan 2022-2025, mientras que la Comunidad de Madrid se acerca mucho a estas cifras con 1.113 millones que suponen 815 millones más. 

La Comunidad Valenciana recibirá 798 millones (557 más), Galicia 399 (292 más); Castilla y León, 378 millones (276 millones más); Canarias, 371 millones (271 millones más); Murcia, 308 millones (257 millones); Castilla-La Mancha, 280 millones (205 millones más); y Aragón, 266 millones (195 millones más). Para Asturias irán 231 millones (174,7 millones más que en el plan anterior); para Extremadura, 210 millones (153,7 millones más), a las Baleares le corresponden 168 millones (123 millones más); a Cantabria, 133 millones (97,3 millones más) y La Rioja, 119 millones, (85,4 millones más).

Atendiendo a los porcentajes de incremento, el mayor corresponde a Murcia (606 %) y el menor a Catalunya (187 %). En este sentido, en el caso de Catalunya, fue la única comunidad que aportó más del 40% de recursos propios a la convocatoria anterior y esta proyección se ha hecho situando la aportación autonómica.

El nuevo plan de vivienda, con una dotación económica el triple que el anterior, es el primero amparado por la nueva Ley de Vivienda. Tiene como objetivos principales el incremento del parque de vivienda asequible, la rehabilitación del existente, reducir la edad de emancipación, la rebaja del esfuerzo financiero para acceder a la vivienda y revertir las zonas de mercado tensionado. 

El 40% de los recursos irán destinados a aumentar la vivienda protegida y las ayudas a la construcción de Vivienda de Protección Oficial. Y un 30% irá a la rehabilitación, con el fin de "dignificar y dar una segunda vida a aquellas viviendas ya construidas". 

Las ayudas al alquiler y al alquiler con opción a compra, así como los avales jóvenes y el fomento de la construcción industrializada son otras de las prioridades del plan de vivienda.

La ministra expresó sus prioridades: "Estamos trabajando en tres vías fundamentales: la de incrementar la oferta para conseguir un parque asequible en este país que pueda controlar los precios del mercado y pueda dar respuesta a las familias de clase media que hoy ven el acceso a la vivienda imposible. En segundo lugar, abordar la regulación para controlar especialmente los abusos en el alquiler. En tercer lugar, mientras avanzamos en estos dos objetivos, ir ayudando a quienes peor lo pasan, a las familias y a la juventud española a través de más ayudas".