Lucy, la Australopithecus más famosa que vivió en África hace 3.180.000 de años, "probablemente" murió al caer de un árbol, según anunció este lunes la revista Nature. La hipótesis de los científicos que han estudiado de cerca el fósil es que Lucy estiró el brazo para intentar parar su caída, cosa que explicaría las diversas fracturas que se encuentran en los restos. Así lo ha asegurado el antropólogo John Kappelman de la Universidad de Tejas en Austin.

Lucy, que era bípeda pero también se movía por los árboles, medía cerca de 1'10 metros y se cree que cayó desde más de 12 metros de altura, a una velocidad de más de 56 km/h. "La muerte se produjo rápidamente" dice Kappelman.

Mediante el estudio de los fósiles y los escáneres 3D, John Kappelman señaló que la fractura del húmero derecho se produce "cuando la mano toca en el suelo en el momento de una caída". Otras fracturas en el hombro izquierdo, en el tobillo derecho, en la rodilla izquierda, en la pelvis y en una costilla, dan apoyo a esta tesis de la caída fatal.

John Kappelman es consciente de que esta no es la única tesis sobre la muerte de Lucy y espera que su estudio plantee y abra nuevos debates. "Algunos científicos estarán de acuerdo y otros no", ha dicho.

Lucy fue descubierta el año 1974 por investigadores norteamericanos y franceses en la región de Afar, en Etiopía, y pertenece a la especie Australopithecus Afarensis. Es un fósil muy completo, ya que se encontró un 40% de su esqueleto. Ha sido conocida durante años como la "abuela de la Humanidad", aunque actualmente ya no se ve como el antepasado directo del hombre, sino más bien como un "primo muy antiguo".