Aunque la cadena de hoteles Río fue una de las primeras al abrir sus puertas al turismo y había llegado a mantener abiertos 22 de sus 28 hoteles en España. Ahora, sin embargo, hace marcha atrás y esta semana prevé cerrar la mitad de los establecimientos que tiene en el Estado español.
Después del confinamiento a raíz de la pandemia de coronavirus, los primeros turistas llegar a Mallorca en junio. Ahora bien, poco tiempo después, a finales de mes, se empezaron a originar rebrotes por todo el Estado español cosa que comportó que muchos países levantaran medidas restrictivas para aquellas personas que viajaban desde España.
Hotel Festival Ríe en Mallorca / Hoteles Río
Diez hoteles abiertos
El pasado domingo el grupo hotelero, controlado por la familia Río, cerró tres hoteles en Mallorca; mientras que este domingo se prevé que baje las persianas de sus nueve establecimientos en Gran Canaria, Tenerife, Fuerteventura, Lanzarote y Málaga.
Con todo mantendrá diez hoteles abiertos a: Formentera, Cádiz, Málaga, Gran Canaria, Fuerteventura, Tenerife y Madrid. "En el caso de Baleares y Andalucía este cierre supone acortar esta temporada alta tan atípica y compleja, pero a Canarias, la temporada alta está todavía para empezar", ha indicado el grupo al diario El Independiente. En este sentido, han recordado que en invierno en las Canarias hace calor, por lo cual lo tienen todo a punto para abrir en "48 horas" si está la demanda pertinente para hacerlo.
Por su parte, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) han asegurado que el sector se recupera lentament, cosa que se le tiene que sumar el cierre de la mayoría de establecimientos de las zonas de vacaciones en septiembre como consecuencia de la desaparición de la demanda extranjera.
Además, desde que ha finalizado el estado de alarma el 50% de los trabajadores del sector han recuperado su trabajo, mientras que la otra mitad siguen en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), una cifra inferior a otros negocios. Al detalle, la reincorporación de otros sectores después de la pandemia se sitúa en el 77.55%.
Desde que se inició la pandemia, alrededor de tres millones de personas han sido incluidas en un ERTE, de las cuales 202.000 son del mundo de la restauración, es decir, un 6,5%.
"El paro de la demanda está provocando la paralización total del sector y, si se prolonga en el tiempo, desaparecerán una gran parte de las empresas y el empleo", apunta a Jorge Marichal, presidente de la asociación, recoge un comunicado de la entidad.