En los últimos años han cambiado muchos paradigmas sobre la alimentación y se han superado muchos mitos. Por ejemplo, los relacionados con los alimentos ricos en grasas, que han sido desterrados al comprobar que las grasas saludables pueden ser muy beneficiosas para la salud  (como las de nueces, las yemas de huevo y los lácteos enteros), siempre que estas sean ingeridas de manera equilibrada.

De hecho, cada vez son más los estudios en los que se señala la importancia de restringir más el consumo de hidratos de carbono (sobre todo aquellos de absorción rápida) y aumentar el de las grasas saludables como el omega 3 y 6. Estos que se señalan a continuación, son algunos de esos mitos que todavía tienen mucha prevalencia en buena parte de la población.

Comer grasas engorda

Comer demasiado de cualquier macronutriente, incluida la grasa, provoca un aumento de peso. Pero consumir alimentos ricos en grasas como parte de una dieta sana y equilibrada no engorda. Por el contrario, consumir alimentos ricos en grasas puede ayudar a bajar kilos provocando una sensación de saciedad. De hecho, numerosos estudios han demostrado que comer alimentos con alto contenido de grasas, incluidos huevos enteros, aguacates, nueces y productos lácteos enteros, se pueden ingerir en una dieta con este objetivo.

Un ejemplo son las dietas cetogénicas, bajas en carbohidratos y altas en grasas, que promueven la pérdida de peso. Pero hay que tener claro que la calidad importa. El consumo de alimentos altamente procesados ​​que son ricos en grasas, como comida rápida, productos horneados azucarados y alimentos fritos, puede aumentar el riesgo de aumento de peso.

AguacatesLos aguacates tienen un alto contenido en grasas y, sin embargo, son muy saludables

Los alimentos ricos en colesterol no son saludables

Muchas personas asumen que los alimentos ricos en colesterol, incluidos los huevos enteros, los mariscos, las vísceras y los lácteos enteros, no son saludables. Sin embargo, no es así. Aunque es cierto que algunos alimentos ricos en colesterol, como los helados, los alimentos fritos y la carne procesada, deben limitarse en cualquier patrón dietético saludable, la mayoría de las personas no necesitan evitar los alimentos nutritivos con alto contenido de colesterol.

Por ejemplo, las yemas de huevo tienen un alto contenido de colesterol y tienen vitaminas y minerales, como B12, colina y selenio. Un yogur natural entero con alto contenido de colesterol contiene proteínas y calcio.

Las grasas saturadas causan enfermedades cardíacas

Si bien el tema aún se debate entre los profesionales de la salud, investigaciones recientes no han demostrado un vínculo constante entre la ingesta de grasas saturadas y las enfermedades cardíacas. Es cierto que las grasas saturadas aumentan los factores de riesgo conocidos de enfermedades cardíacas, como el colesterol LDL (malo) y la apolipoproteína B.

Sin embargo, la ingesta de grasas saturadas tiende a aumentar la cantidad de partículas de LDL grandes y esponjosas, pero disminuye la cantidad de partículas de LDL más pequeñas y densas que están relacionadas con la enfermedad cardíaca. Además, se ha demostrado que ciertos tipos de grasas saturadas pueden aumentar el colesterol HDL (bueno), protector del corazón.

Se deben evitar los alimentos ricos en grasas y colesterol durante el embarazo

A las mujeres embarazadas a menudo se les dice que deben evitar los alimentos ricos en grasas y colesterol durante la gestación. Pero lo cierto es que comer grasas es esencial durante este periodo de la vida de la mujer puesto que la necesidad de nutrientes solubles en grasa, incluidas la vitamina A y la colina, así como las grasas omega 3, aumenta durante el embarazo.

Además, el cerebro fetal, que está compuesto predominantemente de grasas, necesita grasas de la dieta para desarrollarse adecuadamente. El ácido docosahexaenoico (DHA), un tipo de ácido graso concentrado en los pescados grasos, desempeña un papel fundamental en el desarrollo del cerebro y la visión del feto, y los niveles bajos de DHA en la sangre materna pueden conducir a un desarrollo neurológico deficiente en el feto.

Chica embarazadaLas embarazadas no deben dejar de tomar grasas porque el feto lo necesita durante la gestación

Comer grasas aumenta el riesgo de diabetes

Muchos patrones dietéticos recomendados para el tratamiento de la diabetes tipo 2 y gestacional son bajos en grasas. Esto se debe a la idea errónea de que consumir grasas en la dieta puede aumentar el riesgo de diabetes. Aunque consumir ciertos alimentos ricos en grasas, como grasas trans, productos precocinados y comida rápida, puede aumentar el riesgo de diabetes, la investigación ha demostrado que otros alimentos ricos en grasas pueden ofrecer protección contra su desarrollo.

Por ejemplo, el pescado graso, los lácteos enteros, los aguacates, el aceite de oliva y las nueces son alimentos ricos en grasas que, según se ha demostrado, mejoran los niveles de insulina y azúcar en sangre y protegen potencialmente contra el desarrollo de la diabetes.