El pasado 17 de enero, el Fondo de Acceso Global para Vacunas Covid-19 conocido más ampliamente como Covax ha dado más de 1.000 millones de dosis de la vacuna contra la covid. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elogiado que los suministros han llegado ya a 144 países. Las llegadas de vacunas y las distribuciones no son siempre fáciles o sencillas. Sin embargo, las dificultades siempre ponen sobre la mesa algunas aventuras, cuando menos, divertidas en el contexto pandémico que vivimos. En Kenia, con el turismo fuertemente afectado por la covid, los jinetes de camellos, en el norte del país, han aprovechado el rebaño para ayudar a llevar las vacunas contra el coronavirus a las zonas más remotas y de más difícil acceso. Además, también han aprovechado para ganarse la confianza de las comunidades en estas zonas donde, la tasa de rechazo a las vacunas es elevada.

El caso, sin embargo, es que tal como exponen desde Gavi, alianza para la vacunación –una asociación mundial entre el sector público y privado– no es nuevo. En Samburu, en el norte de Kenia, es habitual ver caravanas de camellos que transportan a los enfermos de las aldeas remotas a clínicas de curación tradicional a otras ciudades como Angatarei, Arsim, Lesirikan y Latakweny. Justamente estos caminos son los que utilizan a los jinetes para entrenarse y acabar siendo los mejores para competer al Maralal Camel Derby que atrae miles de turistas. Las ganancias se invierten en proyectos comunitarios sociales y de conservación. El mes de agosto del 2020, sin embargo, la competición se tuvo que cancelar.

"Samburu es conocido por los leones, elefantes, leopardos, búfalos y rinocerontes. Eso ha atraído turistas de Kenia y del extranjero, generando riqueza, pero la covid lo ha parado todo", explicaba John Lepankoi, un entrenador de equitación de camellos en un equipo de Gavi. Durante la pandemia no han registrado visitantes en la zona.

La relación entre los camellos y la covid

A pesar de no haber registrado visitantes por la covid, los camellos han estado y están entretenidos. Ahora, en vez de usarse para hacer carreras y transporte, se están utilizando para educar y concienciar sobre la vacuna contra la covid. Sobre todo, para llegar a los colectivos más remotos con la voluntad de llegar a las 123.000 personas. En este sentido, Lepankoi es uno de los participantes que colaboran con esta iniciativa.

"Nuestras campañas han obtenido unos 300 camellos para trasladar vacunas y para llegar a miles de personas que viven en zonas remotas y de difícil acceso sin carreteras ni otras redes de transporte", destaca también a Gavi, Piu Lelei, uno de los chamanes. La decisión de los chamanes de unirse a la medicina tradicional no fue fácil, pero reconocieron su incapacidad a la hora de encontrar medicinas tradicionales para hacer frente al virus y observaron que había que hacer alguna cosa, constatan desde la asociación.

¿Cuál es la situación de la covid en Kenia?

Según datos del portal Our World in Data, Kenia ha registrado un total de 321.671 casos de coronavirus desde el inicio de la pandemia. Ya desde el mismo portal advierten que el número de tests que se hacen son limitados, un hecho que podría comportar que hubiera más casos de coronavirus de los registrados.

Una tendencia que se puede ver en la gran mayoría de países africanos, tal como muestran los datos del mismo portal en relación con la media de casos diarios confirmados por millones de personas de los últimos 7 días. Kenia tiene una media de 2,2. La vecina Uganda registra un 2,4 y Etiopía un 2,67. Con unos datos un poco más alejados está Sudán del Sur con 0,67 y Somalia con 5,93. Aunque los cuatro países tienen el mismo problema de detección.

Con respecto a la tasa de vacunación, los datos no son positivos (10,7% en Kenia, aunque tiene la tasa más alta de sus vecinos). La falta de vacunas y el rechazo hacia ellas, son dos casuísticas que no ayudan mucho a hacer que el país mire adelante.

Las naciones más ricas tendrían que dar el 50% de sus vacunas

Cuando surgió la nueva variante de la covid ómicron, ya se dijo que una de las causas de su aparición podría haber sido el reparto desigual de las vacunas entre las naciones ricas y las más pobres. Ahora, un estudio ha puesto sobre la mesa que el mundo estaría mejor protegido de las nuevas variantes y habría menos muertos en países de ingresos bajos y medios, si las naciones ricas dieran la mitad de las dosis de vacunas de las cuales disponen.

La investigación ha encontrado que era de interés propio para las mismas naciones ricas dar dosis de vacunas porque la inequidad de la vacuna podría alargar la pandemia y aumentaría el riesgo de nuevas variantes. Así, el estudio, que recoge el The Guardian, constata que si los países con ingresos altos dieran el 46% de sus vacunas contra el coronavirus, los países de ingresos bajos verían una disminución significativa en las muertes por coronavirus. Además, sin embargo, también destacan que pequeñas donaciones ya tendrían un efecto beneficioso desproporcionado.

 

Imagen principal: un camello mirando a cámara / Unsplash