Uno de los sectores económicos más golpeado por la cirsi del coronavirus ha sido el turístico. De hecho, los propietarios de hoteles de Barcelona ya dan la temporada de verano "por perdida" y no prevén que la recuperación de la actividad empiece antes del mes de septiembre.

El Presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Mestre, ha trasladado este viernes al presidente Quim Torra la situación a la que se enfrenta el sector hotelero y turístico, afirmando que "el turismo será una de las industrias que quedará más afectada también después de la pandemia" y que, como mínimo, no calculan recuperar la normalidad hasta 12 meses más tarde de la reanudación de la actividad económica.

Con respecto a esta activación inicial, el presidente del Gremio de Hoteles apunta que el sector es consciente de que lo hará por un turismo de proximidad español y "posiblemente del sur de Francia, con trayectos que pueden ser resueltos en vehículo privado." Mestre pone el acento también en la situación en que se encontrarán de aquí 2 o 3 meses los principales países emisores de turismo hacia nuestro destino, "atendiendo que muchos de ellos podrían tener todavía sus fronteras cerradas".

La dependencia de las compañías aéreas

El sector hotelero catalán dependerá -entre otros varems- de las compañías aéreas y de su ritmo de activación de vuelos nacionales y, sobre todo, internacionales, un hecho que estará supeditado a su demanda. Caldrar tener en cuenta también el miedo de la gente a viajar, que "no desaparecerá hasta que se encuentre y teste una vacuna", opina Mestre.

Medidas para proteger el sector hotelero

En este contexto, las medidas necesarias para proteger el sector hotelero y hacer frente a esta crisis toman importando importancia. La Confederación Empresarial de Hostelería y Restauración de Catalunya (ConfeCat), proponen las siguientes condiciones:

  • Alargar la orden de cierre de los hoteles más allá del levantamiento del estado de alarma y, ampliar el periodo para tramitar los ERTE por razones de fuerza mayor hasta que la actividad turística no se normalice.
  • Supresión del impuesto sobre las estancias en establecimientos de alojamiento turístico durante 24 meses. - Contundencia administrativa con las plataformas que incumplen la ley comercializando oferta de alojamiento turístico ilegal y erradicación de esta.
  • Aplicar un marco regulador mucho más exigente para la actividad de los pisos turísticos que comparten usos con vecinos, favoreciendo la reconversión de esta actividad hacia alquiler de medio y largo plazo que se está dando en estos momentos.
  • Intensificar cuando sea oportuno la promoción para fomentar el turismo de proximidad; adaptar el destino a las necesidades del sector MICE y, hacer un replanteamiento y desarrollo de un gran plan de promoción a nivel global por los próximos 24 meses.