Los servicios de pediatría de los hospitales catalanes están tensados y sin tregua, ya que la bronquiolitis en bebés está disparada en Catalunya y ha superado el pico registrado en el 2019. ¿Sin embargo, qué es la bronquiolitis? Es la inflamación de los bronquiolos (las pequeñas vías respiratorias del pulmón) y es más frecuente en los meses fríos del año (de noviembre a marzo). Ahora, la pandemia ha alterado la estacionalidad y el pico de contagios se ha alcanzado antes de lo habitual. Los niños más afectados son los menores de dos años, aunque los de 2 a 4 años también se ven afectados por la enfermedad porque las restricciones contra la covid-19 impidieron que se expusieran al virus. En este punto, es interesante abordar algunas cuestiones de la bronquiolitis en bebés: tratamiento, síntomas, cuánto dura y cómo se contagia.

Tratamiento de la bronquiolitis en bebés

Desgraciadamente, la bronquiolitis no tiene un tratamiento farmacológico efectivo. Así lo recuerda la Societat Catalana de Pediatria (SCP), que remarca la importancia de no administrar jarabes para la tos, mucolíticos, antibióticos... Lo que sí que se puede hacer es administrar tratamiento de apoyo para mejorar la sintomatología respiratoria, haciendo caso "siempre" de las recomendaciones de los pediatras. Así pues, se puede administrar un antitérmico (si hay fiebre), mantener una buena hidratación con pequeñas cantidades de líquidos y alimentos, hacer lavados nasales y colocar al bebé en una posición más incorporada.

Hay que mencionar que la carga asistencial de la enfermedad afecta sobre todo a la población pediátrica previamente sana, motivo por el cual la SCP había advertido que eso puede generar situaciones de sobrecarga en el ámbito de la Atención Primaria, urgencias, hospitalización y cuidados intensivos pediátricos en periodos epidémicos. Pero el conseller de Salut, Manel Balcells, aseguró hace una semana que el sistema está "preparado" para atender el pico de bronquiolitis.

Bronquiolitis en bebés: síntomas y duración

Habíamos dicho que la bronquiolitis es la inflamación de los bronquiolos, de manera que los síntomas más frecuentes son un cuadro catarral con mucosidad nasal, fiebre o febrícula y tos — también puede evolucionar a dificultad respiratoria si hay mucha secreción que obstruye las pequeñas vías respiratorias del pulmón. Además, el bebé se fatiga y le cuesta comer. La SCP advierte que se tiene que estar alerta si el niño presenta tos persistente, si se le marcan mucho las costillas cuando respira (dificultad respiratoria), si no moja el pañal (come poco) y si está poco activo y quejumbroso. La duración de la enfermedad es de entre siete y diez días.

¿Cómo reducir los contagios de bronquiolitis?

La bronquiolitis está normalmente producida por un virus, siendo el virus respiratorio sincitial (VRS) el más común (3 de cada 4 casos). Este virus afecta sobre todo a los niños menores de dos años, con algunos bebés con más riesgo de sufrir una bronquiolitis grave: menores de tres meses, prematuros, niños con cardiopatía y otras alteraciones de la inmunidad... Es por esto que es mejor prevenir y, para hacerlo, es importante evitar contacto con secreciones respiratorias, lavarse las manos frecuentemente y evitar el humo del tabaco en el domicilio. Además, quien presente síntomas tiene que evitar el contacto con los niños para disminuir el riesgo de transmitir la infección.

Dicho esto, he aquí algunas recomendaciones de la Societat Catalana de Pediatria. Por una parte, lavarse las manos durante 30 segundos con agua y jabón antes y después del cambio de pañal, antes de dar pecho, de preparar el biberón o dar la comida — también se puede utilizar una solución hidroalcohólica. Por otra, evitar llevar a los bebés o menores de 4 años a lugares públicos confinados como el transporte público o centros comerciales, donde podría entrar en contacto con gente resfriada. También es recomendable no compartir biberones, chupetes o cubiertos sin lavar, a la vez que es recomendable lavar regularmente juguetes y peluches. Hace falta abrir las ventanas de la habitación donde duerme el niño y ventilar bien la casa como mínimo diez minutos al día. Haya o no bronquiolitis, no se tiene que fumar donde haya niños. Finalmente, si estás resfriado o resfriada, estaría bien taparse la boca con el codo o la manga e, incluso, protegerse con una mascarilla.