Un mes después de que Junts per Catalunya decretara su ruptura con el PSOE y solo unos días después de que Pedro Sánchez anunciara el cumplimiento exprés de una batería de acuerdos pendientes con el partido de Carles Puigdemont, el presidente del Gobierno se ha mostrado este sábado convencido de que retendrá a esta formación independentista como socio en el Congreso de los Diputados. Así se ha expresado en conversación informal con periodistas después de que en la cámara baja haya tenido lugar el acto de celebración del 47.º aniversario de la Constitución. El máximo líder socialista ha admitido que “no hay contactos” entre ambas formaciones, pero se ha mostrado confiado en que los juntaires continuarán aprobando iniciativas de los socialistas. “Hay legislatura” y "perseveraremos", ha sentenciado.

En esta conversación, Sánchez ha recetado “paciencia” y ha garantizado que agotará su actual mandato hasta 2027. “Creo que los socios quieren legislatura”, ha manifestado, y ha asegurado a los periodistas que presentará los presupuestos generales del Estado. Entre sonrisas, ha afirmado que conseguirá aprobarlos. El presidente español ha hecho estas declaraciones después de que Junts le tumbase, precisamente, el primer paso necesario para aprobar unas cuentas: la senda de déficit.

Y también lo ha afirmado cuando el Gobiernotodavía no ha publicado las balanzas fiscales, que sirven para fiscalizar el porcentaje ejecutado de lo que se ha presupuestado en anteriores cuentas. Se trata de una de las principales exigencias de los independentistas que el mismo Sánchez también se comprometió a cumplir esta semana en dos entrevistas en Rac1 y 2Cat. Sin embargo, el entorno de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, reconoce en conversación con este periódico que esta publicación no será, ni de lejos, inminente. Explican que hay “muchas diferencias metodológicas” entre socialistas y juntaires a la hora de publicarse que son importantes.

El retorno de Puigdemont

Estas mismas fuentes también apuntan que "nada acabará de recomponerse del todo" hasta que Puigdemont no pueda volver a Catalunya. "Está desesperado por volver", opinan; y a la vez confían que este punto final a su exilio se pueda producir pronto, después de que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre su recurso. Fuentes de la presidencia de este tribunal de garantías han manifestado también durante este acto institucional sobre la Constitución que continúan "trabajando" con "rigurosidad" en la carpeta sobre Puigdemont. "Hay que dedicarle tiempo", añaden.

Paralelamente, y también en conversación informal con periodistas, Alberto Núñez Feijóo se ha mostrado convencido de que Junts no se sumará a una moción de censura de la mano de Vox. "Ha sido un kleenex de Sánchez toda la legislatura", ha llegado a decir. También ha opinado que el presidente español continuará cumpliendo pactos con la formación de Puigdemont y que el PSOE conseguirá retener a los independentistas en su trinchera para continuar enrocado en la Moncloa hasta el final del mandato.

“Una legislatura complicada”

Sánchez ha insistido nuevamente en que esta legislatura es “complicada”, sobre todo por la envenenada aritmética que dejaron las urnas en las elecciones generales del 23-J del 2023. “Pero hemos ganado todas las batallas importantes”, ha destacado; asegurando que su partido también ha actuado “con contundencia” cada vez que ha estallado algún escándalo como el de José Luis Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García.

Asume en "primera persona" el caso Paco Salazar

El escándalo que acapara toda la atención estos últimos días es el de Paco Salazar, histórico socialista que hasta hace unos meses trabajaba como asesor en la Moncloa y ha sido acusado de conductas sexualmente abusivas por parte de trabajadoras. Sánchez ha “asumido en primera persona como secretario general del PSOE” la polémica generada porque las denuncias de presuntas víctimas fueron borradas del sistema. “Hemos actuado con contundencia, no con connivencia”, ha aseverado, al tiempo que ha señalado que son las víctimas —anónimas— quienes deben denunciar ante la Fiscalía, cosa que no puede hacer el PSOE.