"No sabía que el Parlament y Montserrat compartíamos fundador, Abat Oliva": esta es una de las frases que ha dicho Manel Gasch, abad de Montserrat y prior de Cuixà, una vez ha recibido el Premio Canigó en la Universitat Catalana d'Estiu, en Prada, por el milenario de la Abadía. Es una de las reflexiones que han surgido después de la intervención del presidente del Parlament de Catalunya, Josep Rull, que ha elogiado el papel de Montserrat a lo largo de la historia de la nación catalana. De hecho, por eso, el president de la cámara catalana ha aprovechado su discurso para anunciar la celebración del milenario del Parlament de Catalunya el año 2027, justo mil años después de las asambleas de Pau y Treva. El año 1027 se constituye el embrión del parlamentarismo en Europa a través de este movimiento social asambleario como respuesta de la iglesia y el campesinado a las violencias perpetradas por nobles feudales y que contaba con el apoyo de los condes, obispos y campesinos. Presidido por Abat Oliba, Rull ha situado las asambleas de Pau i Treva como el origen de las Corts Catalanas y el segundo ejemplo de parlamentarismo europeo, justo por detrás del islandés.
En este marco, Rull ha recordado las palabras de Pau Casals a la Asamblea de las Naciones Unidas, donde, precisamente, el músico mencionaba el hecho de que Catalunya fue "la nación mayor del mundo" porque impulsó el parlamentarismo. Casals, por cierto, rompió su silencio de más de una década de tocar el violonchelo en público en Prada el año 1950. "Las naciones requieren elementos de autoestima para el futuro", ha reivindicado al president del Parlamento, que ha reivindicado como "prioridad" el fortalecimiento de la nación. "En el otro lado de la franja de Ponent han llegado a la conclusión que si no hay nación no habrá nunca más voluntad de ganar al Estado", avisa Rull, que insiste en que "hay que ampliar el perímetro" de la nación. "Son momentos complejos porque el mundo cambia muy rápido", ha dicho Rull, que también lamenta la situación del País Valencià y las Illes de persecución de la lengua catalana. "Tenemos que ser capaces de ponernos de pie", ha reivindicado.
Los "claros y oscuros" de la Abadía
Rull también ha señalado los "claros y oscuros" que ha tenido la Abadía durante los 1.000 años de historia que celebran este año. El president del Parlament ha reconocido la "fuerte incomodidad" que le supuso la visita del rey Felipe VI hace dos meses y, de hecho, en el discurso que ha pronunciado el padre abad, Manel Gasch, han aparecido algunas pancartas con el lema 'Catalunya no tiene rey'. A pesar de eso, tanto el Abad de Montserrat, como el presidente de la cámara catalana y el arzobispo de Girona, Joan Planelles, han coincidido en reivindicar el papel de Montserrat a lo largo de la historia para el catalanismo y los Països Catalans. Rull, además, considera que el monasterio es una "parte indiscernible de la nación porque el pueblo de Catalunya así lo ha decidido" y como la "columna vertebral de la nación catalana". Además, el president del Parlament, como el president Puigdemont, también ha reivindicado la figura de Pompeu Fabra, enterrado en el cementerio de Prada.
En su glosa, el arzobispo de Tarragona ha reivindicado que "Montserrat es una multitud de nombres propios, pero también es escucha de identidad colectiva porque no ha vivido nunca aislada de la realidad nacional." Bien al revés, en Montserrat se ha ayudado a construir una identidad colectiva de marcado carácter espiritual, comunitario, creyendo que integra la lengua, el compromiso social y nacional que nace del compromiso evangélico," ha reivindicado el arzobispo, que asegura que la Abadía habla y ruega en catalán. "Montserrat tiene que seguir siendo una casa común para el país", ha reivindicado Planelles, que reivindica que la Catalunya de las tierras de Elna, de Besalú y de Ripoll, sitúan con la fundación de Montserrat la pieza central de su restauración. "Europa ha sido cristiana, pero Catalunya más", ha reivindicado.
Por su parte, Manel Gasch ha recordado que la presencia de la Virgen y la identificación de Montserrat con Catalunya "se produjo sobre todo a partir del Renaixença, pero la devoción venía de mucho antes en los inicios del monasterio". "Montserrat siempre ha sido comprometida con la lengua y la cultura y tenemos la intención de seguir haciéndolo", ha insistido Gasch, que ha reivindicado el papel del UCE. Previamente, se ha oficiado una misa en Sant Miquel de Cuixà para la entrega del premio Canigó en Montserrat.