Nuevo revés al gobierno de Marga Prohens, después de los ataques a la lengua catalana. El hecho es que el 80% de las familias han escogido el catalán en la escuela —casi dos puntos más que el año pasado—, mientras que la opción del castellano no ha llegado ni al 20%. Concretamente, el 80,52% de las familias con hijos que inician los estudios a cuarto de educación infantil en centros sostenidos con fondos públicos de Balears han elegido la lengua catalana como lengua de primera enseñanza, y solo un 19,48% han optado por la lengua castellana. En cifras absolutas, eso supone 6.458 matrículas en catalán y 1.563 en castellano, según ha informado este viernes a la Conselleria de Educació.
La elección del catalán ha sido especialmente predominante en Menorca, un 91,65% (560 matrículas), por delante de las 51 en castellano (8,35%). En Mallorca, el 82,78% de las familias (5.268) han escogido la lengua catalana, mientras que solo un 17,26% (1.098) han optado por la castellana. En Eivissa y Formentera, los porcentajes se igualan un poco más: un 60,34% de las matrículas (630) en catalán y un 39,66% (414) en castellano.
Los ataques del PP y Vox al catalán
Educació ha informado de que ha incorporado una disposición específica en la nueva orden de admisión y matrícula a las enseñanzas de formación profesional, con el fin de garantizar el derecho de las familias a escoger la lengua de primera enseñanza —cosa que contempla la ley de educación de Balears—. Además, ha explicado que este año ha sido el primero en el cual ha sido posible formalizar la matrícula completamente telemática, una exigencia que Vox había formulado porque consideraba que las familias podían recibir presiones para elegir el catalán si se hacía de forma presencial.
La Obra Cultural Balear (OCB) ha celebrado la respuesta de las familias en las redes sociales: "Una vez más, a pesar de todos los obstáculos y las campañas del Govern para satisfacer a sus socios de extrema derecha. ¡Una gran noticia!". Fue el año pasado cuando el ejecutivo balear empezó a obligar a las familias con hijos de tres años a escoger si querían las clases en catalán o castellano, cosa que se consideró una práctica de segregación lingüística. Entonces, el 78,5% de las matrículas fueron en lengua catalana. Para más inri, el PP y Vox pactaron más presencia del castellano a la educación, cosa que recibió una respuesta contundente por parte de la comunidad educativa.