Exhibición de fuerza de los docentes baleares por el catalán entre amenazas de Vox. Hasta este miércoles, un total de 103 centros educativos de las Balears se han adherido al manifiesto impulsado por la Assemblea de Docents contra el "pacto de la vergüenza" del PP y Vox —el acuerdo presupuestario por el cual se amplía la presencia del castellano a la educación, entre otras cosas. Y eso que la formación de extrema derecha les ha amenazado con despedirlos. Fue este martes cuando el diputado ultra Sergio Rodríguez reprochó desde el Parlamen al conseller de Educació, Antoni Vera, que no haya expedientado a los docentes y los haya puesto "en la calle".

Rodríguez mostró una imagen de la Assemblea de Docents en la cual los profesores salen "con el puño en alto como si fuera una reunión del comité central del Partido Comunista". "¿Y estos son los docentes de los cuales tenemos que fiarnos que no adoctrinen, que velarán por el futuro de nuestros hijos con imparcialidad?", cuestionó. Asimismo, los atacó para decir que serán "el muro de contención" ante las medidas recogidas en el acuerdo presupuestario, como si fueran "la república independiente de casa suya" y que hagan "lo que les dé la gana". "Si no fuera por la buena voluntad del conseller, estarían todos expedientados y a la calle", amenazó. Por su parte, Vera no se opuso a estas palabras y fue objeto de crítica por parte de la oposición.

El manifiesto de la Assemblea de Docents

Al día siguiente de las amenazas de Vox, la Assemblea de Docents ha conseguido superar el centenar de centros adheridos a su llamamiento para rechazar el acuerdo presupuestario, con la lectura del manifiesto en las escuelas durante este miércoles. El manifiesto denuncia "el retroceso social y educativo gravísimo" que supone el acuerdo y expresa su "rechazo más contundente" a unas políticas que desprecian la educación pública, atacan la enseñanza en catalán y ponen en riesgo los valores de la tolerancia, la solidaridad, los derechos humanos y la igualdad. Para estos docentes, el acuerdo no da respuesta a los problemas reales de los centros educativos, sino que "los agrava e instrumentaliza".

Añaden que las medidas "destilan xenofobia" y "no tienen ningún otro objetivo que reforzar sus campañas de odio contra las personas migrantes, y contra el colectivo vulnerabilizado: los menores no acompañados". "Estos niños son nuestros alumnos y no permitiremos que los criminalicen", advierten, agregando que el pacto quiere "destruir" uno de los ejes vertebradores de la sociedad e instrumento indispensable tanto de la inclusión como de la cohesión social: la enseñanza en lengua catalana. En este sentido, los docentes han asegurado que no permitirán que "su sectarismo hunda la igualdad de oportunidades entre el alumnado, venga de donde venga".

 

Por otra parte, censuran que el pacto entre el PP y Vox también "alimenta el negacionismo climático", desafiando el pensamiento crítico y el rigor científico a que estos docentes quieren enseñar. También reprochan que "atenta" contra los valores y la memoria democrática. "Delante de eso, es responsabilidad nuestra boicotear sus efectos y hacer que estos acuerdos sean papel mojado cuando lleguen a los centros", subrayan. Igualmente, reclaman una escuela inclusiva, democrática, crítica y que promueva el bien común, una educación pública y de calidad, con recursos suficientes y con unas condiciones laborales que dejen de propiciar la huida de docentes, así como el respeto absoluto por la lengua catalana, como eje vertebrador de la identidad y como herramienta de cohesión social. "Ante los intentos de imposición y de censura, ante los recortes y las amenazas, responderemos con firmeza y dignidad. Porque la educación no es un privilegio, es un derecho, y no dejaremos que nos la saquen. Ni un paso atrás", concluye el manifiesto.

Desde Vox no han tardado en reaccionar al manifiesto y su portavoz en el Parlament, Manuela Cañadas, ha acusado a los docentes de cometer "auténticas barbaridades" por su oposición al acuerdo presupuestario firmado con el PP. Así, ha acusado las izquierdas y "sus sindicatos y chiringuitos" de animar el "boicot" e intentar "impedir la aplicación y el cumplimiento de la ley". Son antidemocráticos, por mucho que después se les llene la boca con palabras grandilocuentes. Estas rabietas no son más que los últimos coletazos de una izquierda sin rumbo que pretende ganar en las calles lo que ha perdido en las urnas", ha defendido.

Vox insiste en amenazar a los docentes

Cañadas ha asegurado que hay centros que envían circulares a los padres "para llevar a sus hijos con camisetas verdes —el símbolo de la defensa de la educación pública, de calidad y en catalán— a las graduaciones", a la vez que ha criticado a los sindicatos que tildan de vergonzoso "un acuerdo democrático" y que hacen llamamientos al "boicot". "Estamos viviendo auténticas barbaridades", ha insistido, antes de añadir. "Estos son los que se supone que tienen que educar a nuestros hijos y nietos de forma imparcial y sin adoctrinamientos?". Así pues, ha reafirmado las amenazas de su compañero, Sergio Rodríguez, sobre el despido de docentes. Y ha concluido que si vuelve a ser necesario algún diputado de Vox para formar Gobierno, reclamarán dirigir la Conselleria d'Educació: "La pediríamos por justicia social con todos los profesores anónimos que no salen a ponerse una camiseta verde". También ha hablado de los "valientes que se atreven a cuestionar los intolerantes", de una supuesta educación "sin adoctrinamiento" y de "lobbies catalanistas". "Vamos paso a paso, más lento de lo que nos gustaría, pero acabará llegando. Hemos abierto una brecha de esperanza", ha finalizado.

En esta ocasión, Vera sí que ha intervenido y ha considerado que el pacto presupuestario no implica "en ningún caso" cambios en los proyectos lingüísticos. "Ninguno de los puntos implica ningún cambio de proyecto lingüístico. Nuestras líneas rojas son la ley de normalización lingüística, el decreto de mínimos y la autonomía del centro", ha argumentado. Por el contrario, ha asegurado que el acuerdo tan solo prevé reconocer la vehicularidad del catalán y del castellano en la ley balear de educación, como el PP ya pactó con el PSIB en 2022. Finalmente, ha dicho que el lunes hay prevista un encuentro con los sindicatos educativos y ha insistido en que "siempre" ha estado abierto a hablar con ellos.