Los activistas cumplen su amenaza. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha participado este sábado en un acto junto con la vicepresidenta del Gobierno y líder de Sumar, Yolanda Díaz, que ha querido servir para impulsar a la barcelonesa en la carrera de las elecciones municipales 2023. La cola para asistir a la conferencia, que ha tenido lugar en el Palau de Congresos, se ha ido llenando desde primera hora de la mañana, con grandes expectativas de los asistentes --en la última visita de Yolanda Díaz a la capital catalana ya se quedaron fuera del acto centenares de personas--. Pero entre el público ha habido infiltrados: eran activistas comprometidos con conseguir la cesión de la antigua Escola Massana a las entidades que actualmente gestionan el espacio.

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El acto ha empezado con una actuación musical del Coro Rebelde y Les Fourchettes, que ha animado a los asistentes poniéndolos a bailar. A continuación, ha sido la diputada de los comuns Jéssica González quien ha hecho la presentación de las dos protagonistas principales. Y ha sido cuando Yolanda Díaz ha tomado la palabra que los activistas han irrumpido. La vicepresidenta a duras penas ha tenido la oportunidad de dirigir unas palabras al público. "Buenos días. Estoy feliz de estar aquí. La última vez que estuve no había dado todavía un paso adelante...", ha dicho, antes de ser cortada por varias voces provenientes del público, que han clamado al unísono "La Escola Massana se queda en el barrio" mientras mostraban carteles. Muy pronto, y para intentar silenciar las voces, los representantes de los comunes sentados detrás de Díaz, y también el resto del público, se han levantado dando palmas para reivindicar a su candidata entre gritos de "Presidenta". Después de unos momentos de incertidumbre y clamores cruzados, los activistas se han acabado marchando voluntariamente y la vicepresidenta ha podido continuar con su intervención.

Con el precedente de Nou Barris

No es la primera vez que un acto con Ada Colau recibe una regañada. Y es que a medida que se acerca la campaña electoral los colectivos descontentos con la alcaldesa presionan para conseguir las concesiones que reclaman. El domingo 19 de marzo, ahora hace un mes, un grupo de activistas irrumpió el acto de Ada Colau en Nou Barris que contaba con la presencia de Bob Pop y el Gran Wyoming. Era el mismo grupo de activistas que hoy ha reclamado al gobierno municipal que respete el compromiso de ceder la antigua Escola Massana a las entidades que actualmente gestionan este espacio.

En aquella ocasión, el grupo de activistas ya amenazó a Colau con irrumpir en cada acto de campaña que haga desde este momento hasta las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. Una amenaza que con la acción de hoy han demostrado estar dispuestos a cumplirlo. De hecho, a finales de febrero, un grupo de 80 personas del mismo colectivo irrumpieron en la sede de los comuns haciendo la misma demanda al gobierno municipal. En aquella ocasión se atrincheraron en la sede del partido que gobierna en Barcelona y entraron en la sede de Barcelona en Comú en una "acción sorprendida" para reclamar en el gobierno municipal que respete el compromiso de ceder la antigua Escola Massana. Los activistas estuvieron concentrados dentro la sede de la calle Marina 131 cerca de tres horas y, finalmente desconvocaron la acción al conseguir una reunión con el Ayuntamiento.