La secretaría de Estado de Memoria Democrática del Gobierno ha abierto un expediente sancionador contra la organización fascista Falange Española por el enaltecimiento a su fundador, José Antonio Primo de Rivera, y el dictador Francisco Franco en una manifestación el 20 de noviembre pasado, cuando ya había entrado en vigor la nueva ley de memoria democrática. Los falangistas salieron a la calle, autorizados por la Delegación del Gobierno, y exhibieron fotografías de Primo de Rivera, además de banderas españolas y símbolos fascistas. También pronunciaron discursos en la misma línea y cánticos como 'Cara al sol' e hicieron el saludo nazi. Según la nueva normativa, Falange se podría enfrentar a una multa de hasta 150.000 euros: la sanción más dura comprendida por la ley.

El Gobierno abre un expediente a la Falange

Según ha confirmado este lunes la portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, en una entrevista en TVE, "efectivamente, la Secretaría de Estado de Memoria Democrática ha emprendido estas acciones" sancionadoras contra la Falange Española en cumplimiento a la ley de memoria democrática que acababa de entrar en vigor. "Tenemos una ley en vigor en nuestro país, afortunadamente, una ley que viene a reconciliarnos también con los valores democráticos (...) Eso significa dignificar a todas las víctimas, en lo que ocurrió y nos protegió de aquellos que sienten nostalgia por aquellos tiempos, que hacen una apología de la dictadura," ha explicado. Además, la portavoz ha aprovechado para solicitar a todos los grupos políticos "que se reivindican constitucionalistas" aunque después no cumplan la Carta Magna, que apoyen la Ley.

Sanciones por la manifestación franquista del 20N

Aparte de los falangistas, entre los asistentes a la misma concentración franquista que el Gobierno también estudia sancionar está el Movimiento Católico Español. En la concentración, autorizada por la Delegación del Gobierno, asistieron unas cien personas que cantaron el "Cara al Sol" y la Marcha Real de José María Pemán y exhibieron banderas franquistas y de los tercios de Flandes, a la vez que también hicieron en varias ocasiones, el saludo fascista. Después de los hechos, el senador de Más Madrid, Pablo Gómez Perpinyà, exigió "responsabilidades" a la Delegación del Gobierno en Madrid por la autorización de la manifestación. En un vídeo remitido a la prensa, Perpinyà argumentaba que la ley de memoria democrática es "muy clara" y considera "una sanción grave" cualquier convocatoria de un acto "que sirva para la exaltación del franquismo". ¿"Por qué la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, ha autorizado esta manifestación? No lo entendemos", se preguntó el también diputado de Más Madrid en la Asamblea regional.