La denuncia de 41 senadores franceses de diferentes formaciones políticas sobre la vulneración de derechos y libertades en Catalunya y la represión que sufren los presos políticos lejos de cerrarse con la intervención del mismo gobierno francés aún trae cola. Así el diputado francés Paul Molac, que había formado parte del partido de Emmanuel Macron, ha contestado a la ministra de Asuntos Europeos, Nathalie Loiseau, que salió al rescat dels Gobierno y destacó el estricto cumplimiento por parte del ejecutivo español de las normas constitucionales.

Loiseau sostiene que el conflicto catalán es un asunto interno y que los parlamentarios franceses no deben meter la nariz en este asunto. Esta afirmación ha enojado al diputado Paul Molac, que ha recordado a la ministra que en base a la separación de poderes, los parlamentarios no tienen que pedir permiso al ejecutivo francés para pedir al Estado español que respete los derechos humanos.

Paul Molac se un buen conocedor de la causa catalana. Coincidiendo con el inicio del juicio al procés el febrero pasado hizo público vía Twitter su apoyo a los presos políticos catalanes. Molac afirmó también ''organizar un referéndum no es un delito, es un derecho''.