El Alto Representante de la Unión Europea, Josep Borrell, ha vuelto a cargar contra Rusia, después del revolcón con el ministro de exteriores ruso, Sergey Lavrov. Esta vez por una nueva ley rusa que veta la participación electoral a las "organizaciones extremistas". Según Borrell, "esta nueva ley es un instrumento más contra las voces críticas y de oposición que restringirá todavía más el pluralismo político a Rusia".

La disputa continúa

Borrell parece tener al punto de mira Rusia después de la disputa que tuvo con Lavrov. Borrell reprochó el encarcelamiento del líder de la oposición rusa, Alexei Navalni, y Lavrov le replicó con el encarcelamiento de los líderes independentistas. Ahora ha instado "a las autoridades rusas a derogar esta ley y a alinear la legislación rusa con los compromisos que Rusia ha asumido en virtud del derecho europeo e internacional sobre los derechos humanos, incluida la Convención del Consejo de Europa sobre los derechos humanos".

La ley que priva a los partidarios de las "organizaciones extremistas" del derecho a presentarse a las elecciones fue firmada este viernes pasado por el jefe del Kremlin, Vladimir Putin. Borrell apunta que esta legislación "intensifica la supresión sistemática de la democracia, los derechos humanos y las libertades". En un acto que organizó el "think tank" Real Instituto Elcano, Borrell admitió que el ministro de Exterior ruso, Lavrorv, lo "advirtió" que mencionaría el asunto catalán si hablaba de Navalni para "demostrar" que la Unión Europea "también tiene problemas internos de derechos humanos y libertades".

Sin embargo, Borrell insiste y esta vez ha atacado la implantación de la última ley aprobada por el Kremlin y la tilde "de instrumento contra las voces críticas", es decir para censurar a la oposición a que lidera Navalni.

Rusia ve injusto el juicio a los presos

Lavrov, reconoció en una entrevista en el canal de YouTube en directo Solovyov, que advirtió al Alto Representante de Asuntos Exteriores y Seguridad de la Unión Europea, Josep Borrell, que si hablaba sobre el asunto Aleksei Navalni, entonces él sacaría la situación de los independentistas catalanes condenados a prisión.

Dijo así: "Notifiqué al alto representante que si presentaba esta cuestión desde este ángulo durante en una rueda de prensa (considerar Navalni como un preso político), respondería mencionando a los catalanes condenados a 12 años o más de prisión por haber organizado el referéndum sobre la independencia de Catalunya. Los acusaron de organizar este referéndum, pero nadie presentó ninguna prueba por estos hechos. Así pasó"

Puigdemont pidió su dimisión

El presidente de Catalunya en el exilio, Carles Puigdemont, pidió a Borrell que dimita. "No puede ir por el mundo con recetas que no se aplica", dijo. El eurodiputado de Junts per Catalunya aprovechó el conflicto entre Borrel y Lavrov para lanzar que la existencia de los presos daña la "credibilidad" de la UE como defensora de la libertad. "Borrell tendría que haber dicho al ministro de Exteriores ruso Sergei Lavrov que España no tiene tres presos políticos, sino que tiene nuevo", ha dicho.

Junto con Puigdemont, una cincuentena de eurodiputados más reclamaron la cabeza de Borrell por causar "graves daños a la reputación de la UE" con su reacción a la rueda de prensa y a la expulsión de tres diplomáticos europeos. También le han reprochado haber ido a Moscú por "iniciativa propia" y han tildado el viaje de "humillante". La carta tiene el apoyo, sobre todo, de eurodiputados ultra conservadores polacos y de populares de los países del Este y del Báltico. El eurodiputado de Vox, Herman Tertsch, también firmó la misiva.

Imagen principal: Josep Borrell. - EFE