El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, han acordado mantener una reunión de alto nivel "en los próximos días", coincidiendo con la aproximación del límite fijado por Washington para que Moscú acepte un alto el fuego en Ucrania. Será el primer cara a cara entre los dos líderes desde 2019 y llega en un contexto de máxima tensión internacional. El encuentro ha sido propuesto por la Casa Blanca y confirmado este jueves por el asesor de política exterior del Kremlin, Yuri Ushakov, que ha afirmado que los preparativos ya están en marcha. Con respecto a la posible ubicación, Putin ha señalado que Emiratos Árabes Unidos podría ser "un lugar adecuado" para celebrar la cumbre, después de una reunión mantenida este mismo jueves con el presidente emiratí, Mohammed bin Zayed Al Nahyan, en Moscú. "Tenemos muchos amigos dispuestos a ayudarnos a organizar un acontecimiento de este tipo", ha remarcado el líder ruso.
El encuentro bilateral entre Trump y Putin se prevé como un espacio exclusivo entre los dos líderes, dejando fuera del diálogo al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, que ha reclamado en varias ocasiones la necesidad de una negociación directa con el líder del Kremlin para poner fin a la guerra. A pesar de estas peticiones, el presidente ruso ha reiterado que, a pesar de no tener "nada en contra" de una reunión con su homólogo ucraniano, haría falta que se dieran unas condiciones previas que, según su opinión, "están lejos de cumplirse". Mientras tanto, Trump sí que ha mantenido una comunicación reciente con Zelenski. El miércoles, el líder norteamericano habló por teléfono con él y otros líderes europeos para abordar el desarrollo de los acontecimientos en Moscú. "Estoy agradecido a todos por su apoyo. Hemos discutido sobre lo que se ha dicho en Moscú", explicó Zelenski después de la llamada.
Right on my way from our brigades here in Sumy region, I spoke with President Trump. This conversation happened after President Trump's representative, Steve Witkoff, visited Moscow.
— Volodymyr Zelenskyy / Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) Augusto 6, 2025
Our joint position with our partners is absolutely clear – the war must end. And it must be done… pic.twitter.com/NOxZPAdSr2
A pesar de quedar fuera, de momento, de la reunión entre Trump y Putin, Zelenski no ha restado de brazos cruzados. En un mensaje difundido este jueves en redes sociales, el presidente ucraniano ha anunciado una serie de conversaciones con socios europeos, entre las cuales ha destacado una con el canciller alemán, Friedrich Merz. También ha asegurado que mantendrá contacto constante con sus asesores de seguridad nacional a lo largo de la jornada. Zelenski ha vuelto a remarcar que sus prioridades todavía son el establecimiento de un alto el fuego con Rusia, la organización de un encuentro de líderes que permita abrir el camino hacia una paz duradera y la consolidación de un marco de seguridad a largo plazo para Ucrania, en colaboración con Europa y Estados Unidos. "Ucrania nunca ha deseado la guerra y trabajará por la paz de la manera más productiva posible", ha afirmado, insistiendo en que "el mundo tiene influencia sobre el agresor y los medios para verificar si se cumplen sus promesas".
El anuncio de Ushakov sobre la reunión inminente entre Trump y Putin llega justo un día después del encuentro del presidente ruso con el enviado especial norteamericano Steve Witkoff en Moscú. Según el Kremlin, la reunión fue "útil y constructiva" y se centró en la "crisis ucraniana". Por su parte, Trump celebró en su red social, Truth Social, los "grandes avances" conseguidos por su emisario y aseguró que "coincidimos en que esta guerra tiene que llegar al final y trabajaremos para conseguirlo en los próximos días".

El precedente de 2019
Si el encuentro se concreta, será la primera cumbre entre los líderes de Estados Unidos y Rusia desde que Joe Biden se reunió con Putin en Ginebra el año 2021. Pero para Trump y Putin, hay que remontarse hasta el 28 de junio de 2019 para encontrar su último cara a cara institucional. Fue durante la cumbre del G20 en Osaka, en Japón, donde los dos líderes mantuvieron una reunión privada con sus principales asesores. En aquella ocasión, Trump remarcó el buen clima entre ambos mandatarios: "Tenemos muchas cosas por discutir, incluyendo el comercio y también un poco de desarme. (...) Hemos tenido grandes reuniones, una relación muy, muy buena, y esperamos pasar más rato juntos", concluyó asegurando que "muchas cosas muy positivas saldrán de esta relación". El encuentro de este año, sin embargo, llega en un contexto mucho más delicado, marcado por una guerra abierta en Ucrania y una presión diplomática creciente.