Estados Unidos se distancian de su compromiso con la seguridad europea. Según han informado Financial Times y The Washington Post este jueves, la administración Trump tiene la intención de poner fin a varios programas de asistencia en materia de seguridad en Europa, destinados a disuadir a Rusia de posibles ataques al continente. Estos programas hace años que están en marcha, y su anulación afectará centenares de millones de dólares en ayuda militar, de la cual dependen, especialmente, varios países fronterizos con Rusia. En un comunicado enviado a The Washington Post, el ejecutivo norteamericano ha afirmado que la decisión de recortar esta ayuda se ha coordinado con los socios europeos y se enmarca en la intención de Trump de reevaluar el alcance de la financiación enviada por EE.UU. a Europa. "Nos complace que los aliados europeos estén asumiendo más iniciativas en materia de defensa", lee el comunicado. La decisión llega después de numerosas presiones de Washington a los aliados de la OTAN para que aumenten la inversión en defensa, reduciendo así su dependencia del dinero norteamericano.
Si bien el Pentágono no ha proporcionado información exacta sobre la cantidad de dinero que dejará de llegar a Europa con la eliminación de estos programas, una estimación hecha por asesores del Senado sitúa la cifra en unos 1.000 millones de dólares. Entre 2018 y 2022, el programa que ahora será eliminado asignó 1.600 millones de dólares a Europa, según la Oficina de Responsabilidad Gubernamental de Estados Unidos. Los principales beneficiarios de esta ayuda fueron Estonia, Letonia y Lituania —tres países fronterizos con Rusia—, a través de un programa conocido como Iniciativa de Seguridad del Báltico, que aportaban fondos para reforzar la infraestructura militar de estos países. Las tres repúblicas del báltico son los países de la OTAN que más invierten en defensa, a pesar de sus economías relativamente pequeñas. Por esta razón, consideran vital contar con el apoyo económico de Washington.
Sorpresa en el Congreso por la decisión de Trump
Según Financial Times, la decisión ha hecho saltar las alarmas entre los aliados, que consideran que esta decisión contribuye todavía más a fortalecer la posición del Kremlin. "A los rusos solo les importan los dólares norteamericanos, las tropas norteamericanas y la bandera norteamericana", ha aseverado una fuente diplomática europea al Washington Post. La medida, sin embargo, no llega de manera repentina. Funcionarios del Pentágono anunciaron la semana pasada que EE.UU. ya no financiará los programas de entrenamiento y equipamiento de los ejércitos de la Europa del Este, cuyas tropas, en caso de conflicto con Rusia, se encontrarían en la primera línea del frente. Así y todo, varios funcionarios del Congreso —donde el apoyo a la OTAN y a Ucrania todavía es firme a pesar de la mayoría republicana— han expresado su sorpresa por esta decisión de la administración Trump, y han asegurado que no saben con certeza si parte de este dinero estaba destinado directamente a Ucrania. Aparentemente, el Departamento de Defensa no habría informado a los legisladores de ningún detalle con relación a este asunto.
Washington tiene otras prioridades
Según fuentes consultadas por el Washington Post, una de las razones esgrimidas por la administración republicana para justificar la reducción en la financiación de la defensa de Europa es que, en estos momentos, Washington quiere focalizar sus esfuerzos en la seguridad fronteriza y defensa nacional, así como en la pugna geopolítica con China. Expertos familiarizados con la cuestión aseguran que, incluso si los legisladores logran aprobar fondos para reactivar los programas de seguridad europeos, el Departamento de Defensa podría redirigirlos de forma unilateral mediante un procedimiento conocido como “reprogramación”, que permite al Pentágono mover pequeñas cantidades de dinero sin la aprobación del Congreso en determinadas circunstancias.
Este miércoles, durante una visita del presidente de Polonia a la Casa Blanca, Trump dijo que no retiraría a las tropas norteamericanas del país, aunque reconoció que había pensado hacerlo en otros lugares del continente. Por otra parte, este jueves, después de una llamada en que conversó con los líderes europeos reunidos en París, el republicano aseguró que en los próximos días volverá a hablar con Putin. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha confirmado que las conversaciones con Trump "pueden organizarse muy rápidamente si es necesario", a la vez que ha rechazado con convencimiento que existan garantías de seguridad occidentales en Ucrania.