La salida efectiva del Reino Unido de la Unión Europea se produjo el 1 de febrero del 2020. Cinco años después, el Reino Unido y el bloque europeo han mantenido la primera cumbre después del Brexit. El encuentro, que ha tenido lugar en Londres, ha finalizado con declaraciones muy positivas tanto por parte de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, como por parte del primer ministro británico, el laborista Keir Starmer. Los dos socios han pactado una nueva Asociación Estratégica.

Von der Leyen ha asegurado que el nuevo acuerdo supone "pasar página" de la relación en el pasado. "Estamos abriendo un nuevo capítulo en nuestra relación. Esta es la historia de unos socios históricos y naturales que se encuentran estrechamente en la escena mundial, afrontando los mismos retos, asumiendo los mismos objetivos, compartiendo los mismos valores", ha añadido a la presidenta de la Comisión Europea una vez ha acabado la cumbre.

Al lado de Von der Leyen han comparecido también el primer ministro británico y el presidente del Consejo Europeo, António Costa, que la UE y el Reino Unido ahora "están buscando soluciones que sean beneficiosas para nuestros pueblos". Von der Leyen ha subrayado que el acuerdo abre la puerta a la participación del Reino Unido en el programa europeo de inversiones en defensa (SAFE), que proyecta conseguir 150.000 millones de euros de préstamos para adquisiciones conjuntas.

Aparte de este aspecto, Von der Leyen también ha adelantado que han acordado estudiar la participación del Reino Unido en el mercado eléctrico de la UE, aspecto que considera relevante con respecto a la estabilidad de los flujos energéticos y la seguridad energética comuna. También ha destacado que eso posibilitaría bajar los precios de la energía y atraer más inversión privada gracias a la estabilidad reguladora.

Una "nueva era"

En su turno de palabra, Keir Starmer se ha mostrado muy satisfecho del pacto y ha señalado que la Asociación Estratégica "marca una nueva era" de las relaciones de su país con la UE. El Reino Unido gana con el acuerdo varios puntos que incluyen facilitar flujos comerciales de productos agrícolas y un pacto pesquero que garantizará el acceso recíproco en las aguas británicas y europeas hasta 2038.

"Este acuerdo es una victoria para las dos partes y consigue aquello que los británicos votaron: nos da acceso sin precedentes en el mercado de la UE, a la vez que mantiene las líneas rojas de nuestro programa electoral", ha afirmado Starmer, en referencia al control de sus aduanas. El laborista ha dicho que su país "devuelve a la escena mundial", una vez ha cerrado las últimas dos últimas semanas acuerdos económicos y comerciales con la India, Estados Unidos y finalmente la UE. Starmer se ha mostrado convencido que el acuerdo sanitario y fitosanitario para alinear las reglas del sector agroalimentario "impulsará las exportaciones británicas y hará más barato el precio de los productos en los supermercados".