Qué está pasando realmente en Jordania. El príncipe jordano Hamzah bin Hussein, hijo del rey Hussein y la reina Noor y hermanastro del actual monarca del país, Abd-Al·lah II, ha denunciado que está bajo arresto domiciliario en un vídeo que su abogado ha hecho llegar a la BBC. Pero en el trasfondo de la crisis que se ha puesto de manifiesto este fin de semana está la pugna por la continuidad de la monarquía, según apuntan observadores de Oriente Próximo.

El rey Abd Al·lah habría tomado la decisión de cortar las alas a su hermanastro Hamzah, que no deja de consolidarse, para favorecer las opciones de su hijo, el príncipe heredero Hussein bin Abd-Al·lah. Consolida esta hipótesis el hecho que si el monarca tuviera alguna prueba real de que su hermanastro conspiraba para derribarlo lo habría enviado a la cárcel, y no lo habría puesto tan solo en arresto domiciliario. Ahora le ha quedado, eso sí, al hipotético aspirante la sospecha de conspirar con agentes exteriores.

Desde hace tiempo tanto el hermanastro como el príncipe heredero Hussein están compitiendo para ganar aliados entre la población de Jordania, que hay que recordar que incluye a unos 2 millones de palestinos, la mayoría con ciudadanía en el país. Hamzah, de 41 años, tiene un gran historial militar, y ha cultivado el apoyo de varios dirigentes tribales beduinos del país, que son la élite gobernante. En cambio, el príncipe Hussein estaba hasta ahora mucho más débil, pero cuenta con el apoyo de su padre y está incrementando los gestos. Hace un mes provocó una disputa con Israel por el número de guardias de seguridad que quería que lo acompañaran en una visita a la Explanada de las Mezquitas (el Monte del Templo para los judíos). Al final anuló la visita.

Todo eso sucede en un momento delicado de Jordania. La Covid, y la retirada del turismo que la pandemia ha comportado, han dejado al país en una situación delicada, con una fuerte crisis económica, dificultades para hacer frente al déficit y paro al alza. El mandato de Donald Trump también los afectó. El expresidente decidió retirar la ayuda exterior a Jordania, pero el Congreso de EE.UU. lo rectificó.

Una desestabilización de Jordania, fronteriza con Israel y con peso en cuestiones como la Explanada de las Mezquitas, sería muy peligrosa, y ante eso tanto el país hebreo, como EE.UU., como los países del Golfo y también Marruecos ha salido a defender al actual rey jordano. La explanada está regida por el ente islámico Wakf jordano, aunque la policía israelí controla sus accesos, Algunos observadores apuntan también que en el país ha incrementado la presencia el integrismo islámico.

Jordania no estableció la paz con Israel, con quien comparte 300 quilómetros de frontera, hasta el año 1994. Pero ahora los dos países mantienen vínculos estrechos en seguridad, si bien las relaciones políticas han sido tensas los últimos años. Recientemente, Jordania prohibió el vuelo del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, sobre su espacio aéreo, para realizar la que habría sido su primera visita oficial a los Emiratos Árabes Unidos. Sin sobrevolar Jordania, el viaje habría sido mucho más largo, y Netanyahu optó por cancelar la salida.

 

 En la fotografía principal, el rey Abd-lah II de Jordania / Euronews