Millones de votantes en todos los Estados Unidos están llamados este martes a las urnas para elegir una miríada de cargos en elecciones mayoritariamente locales. En algunos casos, la trascendencia de las mismas las ha hecho saltar a las portadas internacionales, como es el caso de las elecciones a la alcaldía de la ciudad de Nueva York, la más poblada del país y una de las más importantes del mundo. Otras han quedado en un segundo plano, pero son clave para el futuro de los dos principales partidos estadounidenses en el contexto de crisis política que vive el país. Las elecciones que se configuran como las más importantes para el panorama nacional, más allá de Nueva York, son las elecciones a gobernador de los estados de Nueva Jersey y Virginia, la elección del fiscal general de este último estado y la votación de un referéndum en California. Este permitiría al estado más poblado de los Estados Unidos redibujar las fronteras de sus distritos electorales fuera de plazo y partidariamente.
La alcaldía de Nueva York, en el centro de las miradas
En el mes de junio, los resultados de las elecciones primarias del Partido Demócrata para la alcaldía de Nueva York sacudieron por completo el escenario político de la izquierda estadounidense. De forma totalmente inesperada, el socialista demócrata Zohran Mamdani, miembro de la asamblea estatal de Nueva York, logró la victoria superando a Andrew Cuomo, exgobernador de Nueva York y a quien todas las encuestas habían dado como vencedor para aquellos comicios. Pocos días después, Cuomo anunció que se presentaría como independiente a las elecciones y la carrera hasta el martes se ha polarizado entre ambos candidatos. Mamdani representa una esperanza para el ala más izquierdista del partido para hacer virar el partido hacia su dirección, y una victoria en la ciudad más poblada del país sería importante para estas ambiciones. Incluso el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha decidido meter baza en las elecciones, posicionándose claramente en contra del candidato demócrata, al que ha tildado de “comunista” y “radical”. Otros han ido más lejos, y le acusan de “antisemita”, “islamista” o, incluso, “yihadista”, por sus mensajes contra las acciones de Israel en la Franja de Gaza, las cuales ha tildado de “genocidio”.
De momento, las encuestas dan una clara ventaja al candidato demócrata, que quedaría unos 15 puntos por encima de Cuomo (con un 31%) y más que doblaría los resultados del candidato republicano, Curtis Sliwa —que no cuenta con el apoyo de Trump, ya que se ha posicionado a favor de Cuomo como resultado de la polarización de la cita— y obtendría un 17% de los votos. Mamdani ha centrado su campaña en hacer de Nueva York una ciudad más asequible para sus habitantes, y se ha hecho popular por el estilo cercano de sus vídeos, que triunfan en las redes sociales y en los que se ha atrevido con varios idiomas, incluido el castellano. Por otro lado, Cuomo se presenta como la alternativa independiente a Mamdani y tacha sus propuestas de radicales e insostenibles. Por su parte, el candidato republicano ha centrado su campaña en la seguridad.
Otros dos estados clave: Nueva Jersey y Virginia
Los demócratas también se la juegan en dos carreras clave en la costa este de los Estados Unidos. Concretamente, en las elecciones a gobernador de los estados de Nueva Jersey y Virginia, que aunque suelen decantarse por el centroizquierda en las elecciones generales, han escogido gobernadores del Partido Republicano recientemente. El estado de Nueva Jersey, que tradicionalmente ha votado demócrata para las elecciones presidenciales, ha elegido, sin embargo, gobernadores de ambos partidos en las últimas décadas y ningún partido ha estado más de doce años seguidos al frente de la administración. Por eso, la candidata demócrata Mikie Sherrill ha querido poner la economía familiar y hacer el estado más asequible para las familias en el centro del debate, que su rival republicano, Jack Cittarelli, ha querido hacer girar en torno a los impuestos altos que pagan los ciudadanos. Las encuestas han dado una clara ventaja a la candidata demócrata, pero que se ha ido reduciendo en las últimas semanas y ahora es de solo seis puntos.
Un poco más al sur, en Virginia, el mensaje principal también gira en torno a la economía, pero más centrado en las políticas de Trump y el cierre del gobierno, que ha afectado a decenas de miles de trabajadores federales que viven en el estado, vecino de Washington D. C. Aquí, las elecciones a gobernador la disputan dos mujeres: la demócrata Abigail Spanberger, que ha centrado su campaña en reforzar la educación pública y reducir los costes para las familias, atacando la política económica de Trump, y la republicana Winsome Earle-Sears, que es la actual vicegobernadora del estado y ha centrado su campaña en las políticas fiscales. Las últimas semanas, sin embargo, la campaña republicana se ha centrado en atacar al candidato demócrata a la fiscalía general del estado por unos mensajes violentos que envió en 2022 y ahora han salido a la luz. Jay Jones, el demócrata candidato a fiscal general, envió en 2022 unos mensajes en los que deseaba la muerte al entonces presidente de la Cámara de Representantes estatal, un republicano. El temor es que su bajada en las encuestas, que ahora dan la victoria a su rival, afecten la ventaja de entre 10 y 7 puntos que Spanberger mantiene sobre su rival en la carrera a gobernadora.
Referéndum en California
Al otro lado del país, en California, los votantes están llamados a decidir sobre una propuesta que permitiría, si fuera aprobada, redibujar los distritos de los representantes que envía el estado a la Cámara de Representantes estadounidense. Esta medida llega después de que Trump pidiera a sus gobernadores hacer cambios en los mapas congresuales para hacerlos más favorables a los republicanos de cara a las próximas elecciones. En Texas, el cambio permitirá a los republicanos ganar cinco escaños más de los 25 que controlan actualmente. En California, una comisión independiente es la encargada de dibujar los mapas una vez cada diez años. Por eso, el gobernador Gavin Newsom propone un cambio que devolvería este poder temporalmente a los políticos para luchar, dice él y la campaña por el "sí”, por la democracia. En este sentido, el exgobernador y actor Arnold Schwarzenegger, que aprobó la creación de la comisión, ha protagonizado la campaña por el "no” con un mensaje centrado en la importancia del poder ciudadano.
La de este martes es la primera gran cita electoral en Estados Unidos desde la inauguración del segundo mandato de Donald Trump el pasado mes de enero. En un contexto marcado por su impopularidad, que en la historia reciente solo supera él mismo en su primer mandato en este punto, los demócratas esperan capitalizar el descontento ciudadano y dar un impulso al partido de cara a las elecciones de medio mandato de 2026. Por otro lado, los republicanos esperan poder revalidar este martes el éxito de los comicios de 2024 y poder exhibir su agenda como ganadora. Los resultados, sin embargo, también marcarán el destino interno de los partidos, sobre todo en el demócrata, donde las facciones izquierda y central luchan por marcar el discurso contra las políticas de Trump y por la elección de un futuro candidato presidencial.
