Tufan Erhürman, partidario de la reunificación de Chipre y líder del socialdemócrata Partido Republicano Turco (CTP), ha ganado este domingo con el 61,76% de los votos la primera ronda de las elecciones presidenciales en la República Turca del Norte de Chipre (RTNC), lo que abre la puerta a retomar los contactos, congelados desde 2017, por la reunificación de la isla y el fin de los 50 años de división entre las comunidades turca y griega. Según los datos de la YSK, la autoridad electoral central, Tufan Erhüman se ha impuesto al actual presidente, el nacionalista pro turco Ersin Tatar, que estaba apoyado por Turquía, el único estado que reconoce la independencia de la RTNC, y que defiende la creación de dos estados separados para las dos comunidades de la isla mediterránea. En las presidenciales del año 2020, Erhüman quedó tercero en la primera vuelta, con el 25% de los votos, y no pasó a la ronda definitiva, donde Tatar se impuso con el 67% de los apoyos. En las elecciones de este domingo, sin embargo, el actual presidente ha recibido el 35% de las papeletas en un contexto de mayor participación que en 2020, con un 65%, seis puntos por encima de la primera vuelta hace cinco años.
En su primera declaración tras anunciarse el resultado, Erhürman ha afirmado que será un presidente imparcial y para todos los turcochipriotas, a los que ha pedido mantenerse unidos. "Hemos dicho que no nos dividiríamos. Hemos dicho que nos uniríamos y lo hemos hecho. Esta será mi brújula durante mis cinco años de mandato. Trabajaremos intensamente por nuestros hijos", ha afirmado. También ha prometido que mantendrá una estrecha colaboración con Turquía en todos los asuntos de política exterior y que la paz y la seguridad del pueblo serán su principal prioridad. Como futuro presidente de la RTNC, Erhürman será quien decida y represente la posición turcochipriota en una eventual negociación de reunificación con la República de Chipre, aunque el gobierno de la república turca seguirá en manos del Partido Unidad Nacional (UPB) del que Ersin Tatar fue presidente. Al otro lado de la línea verde, que divide Chipre en dos mitades y que administra las Naciones Unidas, el presidente de la República de Chipre, Nikos Christodoulides, ha felicitado a Erhüman por la victoria y se ha ofrecido a reunirse con él lo antes posible.
Partidario de una resolución negociada al conflicto
Erhürman participó activamente a principios de los años 2000 en las negociaciones sobre la reforma constitucional y en las discusiones del llamado ‘plan Annan’ favorecido por la ONU, lo que lo convirtió en un interlocutor clave para los partidarios de una solución bizonal y bicomunal. Para Erhürman, la federalización de Chipre no es solo una salida política, sino también una vía para garantizar la prosperidad económica mediante la integración europea. El vencedor de los comicios considera que turcochipriotas y grecochipriotas deben convivir en el mismo Estado federal con igualdad política, seguridad mutua y garantías internacionales, y que esta salida negociada del conflicto daría amplia autonomía a las dos zonas en un estado común para los chipriotas.
La isla mediterránea de Chipre está dividida desde 1974, cuando las tropas turcas invadieron el tercio norte, en respuesta a un golpe de Estado de nacionalistas grecochipriotas, y fomentaron la creación de la República Turca del Norte de Chipre, que proclamó unilateralmente su independencia en 1983, sin reconocimiento internacional. Las Naciones Unidas, que son favorables a las negociaciones de reunificación, estancadas desde 2017, anunció el pasado septiembre su intención de emprender, después de las elecciones, un nuevo intento para retomar el diálogo entre greco y turcochipriotas. Por su parte, el presidente grecochipriota ha aprovechado para reiterar su disposición a retomar los contactos para solucionar la división de la isla que se interrumpieron en 2017, y dijo que la solución debe basarse en las resoluciones de Naciones Unidas y en los valores de la Unión Europea.