Bulgaria votó un nuevo parlamento el mismo día que se celebraban las elecciones europeas. A pesar de todo, no ha sido suficiente para conseguir desencallar la situación del país. Ahora, se encamina a nuevas elecciones generales, las séptimas en tres años y medio, después de fracasar este lunes el último intento de formar a un ejecutivo surgido de los comicios celebrados en junio. Toshko Yordanov líder de la formación populista Existe Tal Pueblo (ITN), que con solo 16 del total de 240 escaños del parlamento, ha devuelto este lunes al presidente del país, Rumen Radev, el encargo que recibió hace una semana.
Al acto en la sede de la presidencia, Yordanov ha dicho al cabo del estado que su partido mantuvo conversas con las otras fuerzas parlamentarias, excepto el DPS, el partido centrista turco, pero no consiguió el apoyo necesario. "Por eso le devolvemos el mandato incumplido", ha declarado el político, el intento de formar un nuevo gobierno que cuente con el apoyo necesario del parlamento constituido después de las legislativas del 9 de junio pasado fue el tercero y el último previsto por la Constitución.
Previamente, habían fracasado los intentos del partido más votado, el conservador GERB (68 diputados), y de la coalición europeísta PP-BD, que con 39 escaños quedó en segundo lugar. Al referirse a la necesidad de volver a convocar a los ciudadanos a las urnas, muy probablemente en octubre, Radev aludió a la crisis política en que está sumida Bulgaria desde el 2021, con solo dos gobiernos regulares de corta duración.
La inestabilidad política del país más pobre de la UE
"La espiral de elecciones inconclusas sigue girando, y eso no solo incluye irritación, sino también el inicio de una serie de procesos destructivos, bloqueo de instituciones, alienación de los ciudadanos del proceso democrático de elecciones e incluso dudas sobre el parlamentarismo como forma de funcionamiento de Estado," ha advertido al presidente.
Ahora se espera que el jefe del Estado, de acuerdo con la ley, haga consultas con todas las fuerzas parlamentarias para nombrar a un primer ministro que proponga un ejecutivo técnico, encargado principalmente de gestionar el país hasta los próximos comicios. Sin embargo, la Constitución no establece plazos para las consultas ni para el nombramiento de un gobierno interino.
La inestabilidad política en Bulgaria amenaza las ambiciones del país más pobre de la Unión Europea (UE) de integrarse plenamente en el espacio Schengen (después de abolirse los controles fronterizos por aire y mar), y su entrada en la zona del euro, prevista inicialmente 1 de enero del 2025 y pospuesta al 1 de julio del 2025.