¡Sí! Es adecuado y la opción más recomendable por muchos motivos, tanto estéticos como prácticos e incluso relacionados con la salud. Frutos secos, patatas fritas, galletas dulces o saladas, encurtidos, gusanitos caseros o industriales… en definitiva todos esos productos que sacas para acompañar un refresco tanto si estas solo como cuando vienen visitas. Todos sabemos que los snacks nunca deben faltar en casa, aunque a la hora de guardarlos no siempre está clara cual es la mejor opción.

Por qué debes guardar los aperitivos en tarros de vidrio

En el paquete solo aparece una corta indicación: “guardar en una zona seca y fresca”. Pero no dice nada del recipiente más apropiado ya sea para alargar su vida y conservarlos más tiempo o para preservar sus cualidades. Los tarros de cristal son la mejor opción y aquí van las razones por las que debes cambiar ya.

Comodidad

Los recipientes de vidrio son fáciles de limpiar, de almacenar y de reutilizar. Al igual que para los snacks, los tarros de vidrio son ideales para la pasta, el arroz, las legumbres, la harina o el azúcar. No hay nada más cómodo para rellenar y también para coger la cantidad que deseas y volver a cerrar.

Organización

Además de la limpieza visual que proporciona una despensa llena de tarros de vidrio, el cristal nos deja ver fácilmente qué tenemos y qué cantidad de cada uno de los productos queda. Adiós a cajas que aparecen vacías, a esas bolsas arrugadas que solo contienen migas o, lo que es peor, que se quedan en el fondo del mueble y nadie se acuerda de ellas hasta que han caducado.

Es adecuado y la opción más recomendable por muchos motivos, tanto estéticos como prácticos e incluso relacionados con la salud. Frutos secos, patatas fritas, galletas dulces o saladas, encurtidos, gusanitos caseros o industriales

Limpieza

Se acabó el tener bolsas abiertas de las que cae el contenido y todo se llena de migas. También paquetes diferentes que se derraman o se rompen. Los envases de cristal aportan una imagen uniforme a nuestras estanterías, pero también son mucho más sencillos de limpiar y de mantener en orden.

Mejor conservación

El vidrio es el mejor material para conservar los productos, independientemente de si se trata de unas chucherías, unas nueces o unas verduras cocinadas. Su cierre puede ser hermético y evitar así que entren bacterias u otros olores o sabores. Al no entrar aire, su sabor y olor se conserva en mejor estado durante más tiempo.

Sabor original

Además de no dejar entrar sabores externos, el cristal tiene una ventaja sobre el plástico y es que este no aporta ningún sabor por mucho tiempo que lo dejes. Y es que el plástico o el metal sí terminan transfiriendo parte del sabor y en muchas ocasiones es un tanto desagradable.

Por tu salud

Un apartado que es muy importante. Los envases de plástico están diseñados para mantener sus propiedades un tiempo, que puede ser más largo o corto dependiendo del tipo de plástico. Pasado este tiempo o esos usos, ese material deja de ser tan estable y parte de sus propiedades se desprenden y pueden intoxicar el alimento en sí. Esto se acelera si se expone el plástico a cambios de temperatura o si se reutiliza más veces de las señaladas, algo que en ocasiones es complicado de controlar.

Más sostenibles

No hay material más sostenible que el cristal. Tanto por sus usos ilimitados como por lo sencillo y eficaz que es su reciclaje. Ser más ecológicos puede ser el motivo final para dejar de comprar en bolsas y apuntarse al granel. Además, este tipo de productos suelen ser más económicos y con una calidad superior.

Después de todos estos motivos, seguro que ya estás pensando en los recipientes que necesitas. La mejor opción es tener siempre disponibles envases de diferentes tamaños y no olvidarse de las etiquetas, no solo para poner qué es (que esto queda muy bonito) también para indicar la fecha y controlar las caducidades.