Unas menudencias gigantes. Que la trufa funciona con el hígado, especialmente con el foie gras, es un secreto a voces. Pero, y con los riñones? Si te gustan las menudencias no dejes de preparar esta maravillosa receta. Tan fácil de cocinarla como de compartirla con quien más prefieras. Y, por supuesto, con un trago de vino tinto, vino blanco o vino rancio, la vida es un lugar mejor.
Ingredientes
- 500 g de riñones (de vaca o de cordero)
- 250 g de cebolla blanca o de Figueres
- 4 dientes de ajo
- 150 ml de vino rancio seco
- 150 ml de agua
- 10-15 g de trufa de verano (1 trufa)
- Aceite de oliva virgen extra
- 2 hojas de laurel
- Sal
Receta
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Limpiar los riñones: retirar la grasa y las venas (este paso puedes pedírselo al carnicero/a), y sumergirlos en un litro agua fría con 2 cl de vinagre y una pizca generosa de sal durante 15 minutos. Remover enérgicamente, colar y reservar.
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Pelar y picar los ajos y la cebolla.
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Calentar una sartén con un chorro generoso de aceite de oliva. Cuando esté al rojo vivo, echar los ajos y la cebolla, y sofreír 15 minutos a fuego medio.
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Añadir los riñones al sofrito, salpimentar y rehogar 3 minutos a fuego vivo. Agregar el vino rancio, el agua y las hojas de laurel, y dejar reducir 20 minutos (o hasta que los riñones estén tiernos). Si es necesario, agregar un poco más de agua. Debe quedar cremoso, ni seco ni aguado.
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Justo en el momento de servirlos, delante de tu comensal, ralla la trufa por encima.
Riñones con trufa de verano / Foto: Sergi Alcàzar
Consejo
Para disfrutar intensamente de las menudencias, cómpralas en una tienda de confianza y límpialas con energía. Además de buenos, los riñones son muy saludables.