El año pasado, solo en España se tiraron 1,17 millones de toneladas de comida. Y si esta cifra impacta, lo hace todavía más el saber que en cada hogar la cantidad supera los 65 kilos. Es mucho dinero, pero también muchos recursos y una huella medioambiental enorme. Muchos de esos alimentos que acaban en la basura no solo son yogures y verduras que se han quedado perdidos en la nevera. También se incluyen productos en perfecto estado que supermercados (no solo grandes superficies) y restaurantes desechan y acaban en grandes contenedores.

Medidas contra el despilfarro

Hace ya unos años que los restaurantes están obligados a entregar lo que sobra al consumidor. Una medida que se ha hecho popular y ya no es extraño salir de un local con tu bolsa con las sobras de la comida. También los supermercados quisieron romper esas altas cifras de desperdicio bajando el precio a los alimentos frescos que estuviesen a punto de caducar. Pero esto no siempre es suficiente y el desperdicio sigue siendo amplio.

Una de las soluciones que más ha triunfado entre comercios y clientes son las apps para salvar comida. La mayoría funcionan de una forma muy similar. Te descargas la aplicación, marcas donde vives y te presenta las ofertas disponibles en tu zona. Los packs varían sus precios dependiendo el local y el qué contenga, aunque suelen ser sorpresa y los precios oscilan entre los 3 y los 6 euros.  A esta moda se han apuntado tanto grandes supermercados como pequeños comercios y el resultado está siendo muy positivo.

Aliments malbaratament / Foto: Unsplash
No es extraño salir de un local con tu bolsa con las sobras de la comida / Foto: Unsplash

En mi caso he tenido experiencias de todo tipo. Algunas muy positivas y otras que puedo considerar grandes fracasos. ¿El truco? Ir probando. Al ser cantidades asequibles es fácil ir cambiando y apostando por diferentes establecimientos hasta saber cuáles funcionan mejor y cuáles es mejor no repetir.

A la hora de considerarlo una buena compra valoro la variedad. Porque una cosa es que te den una lechuga a punto de pasar a mejor vida a que te den tres: ¿qué haces con tres lechugas medio pochas? Tirarlas tú y enfadarte mucho. Estos packs sorpresas también me han ayudado a consumir productos que antes no había probado ni me planteaba comprar. En algunas ocasiones he repetido y en otras no, pero ya sé por qué. Una última lección que he aprendido es que es mejor apostar por supermercados o tiendas que tengan una gran variedad. Es cierto que las panaderías ofrecen buenísimos packs, pero corres el peligro de juntarte con 7 bollos y si no tienes un cumpleaños cerca... te los vas a comer tú y vas a echar por tierra la operación bikini. Y una cosa es salvar el planeta y otra poner en riesgo tu salud cardiovascular.

3 aplicaciones para salvar comida

Too Good To Go

Pionera en el sector y con una oferta super amplia. Al ser una de las más utilizadas, el apartado de las valoraciones es muy fiable.

Aliments malbaratament / Foto: Unsplash
Existen aplicaciones para salvar comida / Foto: Unsplash

Phenix

Su opción de filtros es muy útil para encontrar lo que buscas. El problema es que tiene menos opciones (al menos en mi zona) y la lista de establecimientos es más reducida.

La colmena dice que sí

Contacto directo con productores locales para obtener los mejores precios. Ideal para productos frescos, aunque los precios no son para tirar cohetes, sí es válida con la idea de apoyar al agricultor de tu zona y evitar la contaminación de varios transportes. Por supuesto, todo lo que ofrecen es de temporada.

Bene Bono

La fruta es el alimento que más se desperdicia y en parte porque estamos acostumbrados a comprar solo las frutas más bonitas. Esta empresa se encarga de reunir esa patata con forma rara, ese pimiento demasiado torcido o las peras que no pasan la primera prueba en el concurso de belleza del súper, pero que está igual de rica. Aquí no hay muchas sorpresas, ya que te dicen que llevará tu propia caja e incluso te da la opción de hacer algunos cambios. ¿Recomiendas alguna más?