Limpiar las persianas suele ser una de esas tareas domésticas que dejamos para el final de la lista. No es difícil entender por qué: limpiarlas es pesado.
Tradicionalmente, se ha recurrido a métodos como el vinagre, el agua con jabón o incluso soluciones caseras con bicarbonato, pero hoy te revelamos un truco mucho más efectivo.
Un truco infalible
Pues bien, el truco es usar toallitas para la lavadora. Esas mismas toallitas que usas para atrapar pelusas en el tambor de la lavadora también pueden ser tus mejores aliadas para dejar las persianas como nuevas. Este método, además de ser extremadamente práctico, es rápido, económico y mucho más eficaz de lo que imaginas.
¿Cómo funciona el truco?
Las toallitas atrapa-suciedad para lavadora están diseñadas para absorber tintes, residuos y pelusas durante el lavado de ropa. Su estructura de microfibra y su capacidad de atracción electrostática las convierten en el material ideal para limpiar superficies como las persianas. Aquí te explicamos cómo usarlas:
- Toma una toallita seca directamente del paquete. No es necesario humedecerla ni añadir ningún producto de limpieza.
- Deslízala suavemente sobre las láminas de la persiana, de lado a lado. Notarás cómo recoge el polvo y la suciedad al instante.
- Para rincones difíciles o persianas exteriores, puedes envolver la toallita alrededor de una espátula o cuchillo plano, lo que te permitirá llegar a los espacios más estrechos.
- Una vez que la toallita esté sucia, simplemente deséchala y continúa con otra limpia.
Materiales que necesitarás:
- Toallitas para lavadora (de cualquier marca comercial)
- Guantes de limpieza
- Un palo de madera o espátula (para persianas muy sucias o de difícil acceso)
Ventajas frente a los métodos tradicionales
- No necesitas productos líquidos: Evitas el goteo, las manchas de agua y los residuos jabonosos.
- Sin olores fuertes: A diferencia del vinagre o el amoníaco, las toallitas no desprenden aromas desagradables.
- Más rápido y limpio: No necesitas preparar mezclas ni enjuagar.
- Para todo tipo de persianas: No raya ni daña plásticos, metales o maderas barnizadas.
Además, este truco es perfecto para quienes tienen poco tiempo. Al no necesitar trapos ni productos adicionales, puedes limpiar tus persianas de forma rápida, incluso entre otras tareas. Es ideal para limpiezas exprés antes de recibir visitas o cuando quieres darle un repaso rápido a tu hogar sin complicarte.
Si estás cansado de luchar contra el polvo a la hora de limpiar la persiana, es hora de cambiar de estrategia. Pruébalo, te aseguramos que no vas a cambiar de método.