Uno de los nombres que salieron durante la última reunión que Joan Laporta mantuvo con Jorge Mendes fue el de Rubén Neves. El mediático representante ofreció los servicios de su cliente al Barça, consciente de que necesitan a un sustituto de garantías para Sergio Busquets, que ya hace mucho tiempo que dejó de estar a su mejor nivel. Y era una posibilidad que parecía gustar bastante, especialmente, a Mateu Alemany, que recomendaba su incorporación.
Porque se ha convertido en la gran estrella del Wolverhampton Wanderers, y en uno de los mejores centrocampistas de toda la Premier League. Año tras año ha rendido a un nivel sensacional, y eso le ha servido para colarse en la agenda de clubes de la talla del Manchester United, el Chelsea, el Liverpool o el Arsenal. Pero el internacional portugués no se había mostrado dispuesto a marcharse… hasta este verano, en el que cree que ha llegado el momento.
Se siente preparado para iniciar un nuevo desafío y dar un salto muy importante en su carrera. Desea jugar en un conjunto que le garantice pelear por títulos, y participar en la Champions League, y la posibilidad de aterrizar en el Camp Nou parecía seducirle mucho. Sin embargo, no es la única opción de futuro que tiene sobre la mesa, y en caso de que no sea posible ponerse a las órdenes de Xavi Hernández, no tendrá problemas en estudiar otras ofertas.
Y eso es lo que sucederá, pues desde el Barça le han comunicado que no tienen el dinero necesario para poder afrontar el coste de la operación, que rondaría los 55 millones de euros. Este verano se han marcado como prioridad la llegada de Robert Lewandowski y la de un central galáctico, que puede ser Jules Koundé, y se han olvidado del resto de posiciones. Así que piden a Neves que tenga paciencia, y aguante otro año más en los ‘Wolves’.
Pero la respuesta del ex del Oporto ha sido inmediata, y ha hecho saber que tiene mucha prisa. Así que comenzará a negociar con el resto de pretendientes que tiene.
Adama Traoré, de regreso a Inglaterra
De manera que Neves no llegará a La Liga Santander, y tampoco se quedará en el Molineux Stadium, así que no coincidirá con Adama Traoré. El nombre del extremo español también salió en la reunión que mantuvieron Laporta y Mendes, y desde hoy ha dejado de pertenecer al Barça, después de expirar su cesión.
Xavi ha desaconsejado hacer cualquier tipo de intento para retenerlo en la plantilla, y cree que lo mejor es ahorrarse los 30 ‘kilos’ que costaba quedárselo en propiedad.
¿Le darán los ‘Wolves’ una nueva oportunidad?