En el PSG saben que el partido del miércoles en Montjuïc frente al FC Barcelona será de máxima exigencia. Luis Enrique, conocedor como pocos del entorno azulgrana, lleva varios días transmitiendo mensajes claros a su vestuario: hay que tener vigilado muy de cerca a Pedri González. El técnico asturiano no esconde su admiración por el canario y lo considera una de las piezas que más pueden desequilibrar la eliminatoria.
Pedri, en el punto de mira
Pedri llega a la cita en un gran momento de forma. Tras dejar atrás los problemas físicos que tanto lo condicionaron en temporadas anteriores, el canario se ha consolidado de nuevo como uno de los grandes referentes del equipo. Su capacidad para pausar, acelerar y cambiar el ritmo de los partidos es lo que más preocupa a Luis Enrique y a su cuerpo técnico.
El entrenador del PSG ha advertido a sus jugadores que no basta con marcar a Pedri de manera individual, sino que todo el bloque debe estar atento a sus movimientos. El exentrenador culé considera que el mediocampista es el auténtico metrónomo del Barça y que, cuando está inspirado, arrastra al equipo hacia la excelencia.
El socio perfecto de De Jong
Otro de los puntos que preocupa al PSG es la conexión entre Pedri y Frenkie de Jong. Con el neerlandés en el campo, el canario se libera y encuentra espacios para desplegar su fútbol. Flick lo sabe y suele juntarlos en el centro del campo siempre que puede. Ante un rival tan poderoso como el PSG, esa sociedad puede ser decisiva.
Luis Enrique ha hecho especial hincapié en este aspecto en las últimas sesiones de vídeo: cortar los circuitos de pase entre Pedri y De Jong puede ser una de las llaves para frenar al Barça.
Una madurez que asusta
A sus 22 años, Pedri juega con la tranquilidad y la claridad de un veterano. Luis Enrique lo conoce bien, pues lo dirigió en la selección española y siempre lo consideró un futbolista generacional. Su regreso al mejor nivel ha sido celebrado en el vestuario culé, donde todos coinciden en que es el jugador que más cambia la cara del equipo cuando está en el campo.
Para el PSG, el plan pasa por reducir al máximo su influencia, presionarlo desde el primer momento y evitar que reciba con comodidad entre líneas. Pero todos saben que incluso con rivales encima, Pedri es capaz de encontrar soluciones y marcar diferencias.
Un aviso necesario
Luis Enrique no se fía. Sabe que controlar a Pedri puede ser la clave de la eliminatoria. Y en el Barça lo saben bien. Si el canario aparece en su mejor versión, el PSG tendrá un reto enorme para frenar a un futbolista que está llamado a marcar la eliminatoria.