El Girona dio un paso importante este jueves para sus aspiraciones de ascenso a Primera después de superar al Almería (1-0) en Montilivi. Gracias a la victoria, los de Francisco Rodríguez ocupan la quinta posición con 59 puntos, con 4 de margen en la zona de play-off y a sólo cuatro del segundo, el Huesca. Quedan tres partidos de campeonato y la gesta del ascenso directo no es imposible. 

Francisco blinda la portería

El de este jueves fue el tercer partido de Francisco como entrenador del Girona y, por tercera vez, el conjunto gerundense no recibió ningún gol (1-0, 0-0 y 1-0). Tal como había pasado contra el Zaragoza y el Sporting, los de Montilivi mostraron una fiabilidad defensiva total, hecho que provocó que el Almería dispusiera de pocas oportunidades claras para marcar.

En la primera parte, de hecho, el dominio del Girona fue abrumador, pero las grandes acciones individuales de Samu Saiz, el mejor del partido, no fueron correspondidas por Borja García y Johan Mojica, quien no paró de efectuar centros defectuosos durante los 90 minutos.

 


Así, tal como pasó hace dos jornadas ante el Zaragoza, el duelo se tuvo que resolver desde los once metros. Cuando sólo quedaban quince minutos para el final, David Costas cometió un penalti estúpido sobre Valery, a quien propinó un codazo, y Cristhian Stuani no falló la pena máxima. El uruguayo, el genio de la categoría, ya suma 26 goles este curso.

El Girona tiene que mejorar varios aspectos ofensivos, pero, hoy por hoy, parece uno de los equipos que afrontará el play-off con más optimismo. La sexta plaza todavía no está definida y el Zaragoza y el Almería van a la baja. El sueño de Primera, que por momentos parecía que se desvanecía, está más vivo que nunca.