Después de vencer por los pelos al Español, el Real Madrid afronta un nuevo capítulo complicado. Esta vez, sin embargo, los problemas pueden venir de los despachos, y es que el club blanco se endeudará con 575 millones de euros para llevar a cabo la renovación del Santiago Bernabéu.

La asamblea del club blanco autoriza la remodelación del estadio blanco con casi todos los votos a favor. Florentino Pérez ya tiene luz verde para llevar a cabo su macrooperación, que empezará el año que viene de la mano de la firma GMP Architekten. Según el presidente del Real Madrid, la reforma convertirá el estadio madridista en un espacio "vanguardista, que satisfará las demandas de los socios y permitirá ingresar más de 150 millones de euros por temporada".

Los socios, convencidos

Aunque los argumentos de Florentino han convencido en gran parte de los asamblearios (1.017 votos a favor, 57 en contra y 23 abstenciones), los pocos socios discordantes han recriminado al máximo mandatario blanco el "derroche" que supondrá la operación, que endeudará al Real Madrid por un plazo de hasta 35 años. Algunos otros, incluso, han pedido que sea el propio Florentino quien asuma el coste de la rehabilitación.

El presidente blanco ha defendido su modelo de negocio, que según él ha llevado al Real Madrid a ser "líder en el aspecto deportivo y económico", y ha asegurado que "ahora es el mejor momento para endeudarse a largo plazo porque la solvencia financiera del club lo permite". Florentino también ha añadido que las obras se prolongarán durante tres años y medio y ha insistido en que "no tendrán impacto en el desarrollo deportivo del club".

El nuevo Bernabéu estará cubierto de una piel de acero donde se reflejarán imágenes, una cubierta fija y retráctil que protegerá las localidades, y nuevas vías de evacuación y acceso. La reforma también contempla la creación de nuevas tiendas y oficinas.

Florentino no quiere jugar en los EE.UU.

Aparte de la reforma del estadio, Florentino Pérez también ha valorado varios aspectos de la actualidad blanca. Por lo que respecta a la polémica sobre el Girona-Barça que la Liga quiere que se juegue a Miami, Florentino ha asegurado que el Madrid "se negará rotundamente a viajar a los Estados Unidos".

El presidente blanco también ha querido cerrar la polémica sobre Cristiano Ronaldo, que este verano se ha marchado a la Juventus por la puerta de atrás, considerándolo "un referente y un ejemplo". Antes de acabar, Florentino ha defendido la tarea de Julen Lopetegui, de quien ha recordado que "no perdió ningún partido con la selección española".