Este sábado tampoco ha podido ser (2-0). Con el campeonato de Liga en el saco y la ida de las semifinales de la Champions encarrilada, Ernesto Valverde ha querido dar descanso a casi todos los titulares para llegar en perfectas condiciones en Anfield y certificar la final de la máxima competición europea después de cuatro años.

Arthur pierde la opción de estar en Anfield

El técnico extremeño ha presentado un once atípico, que ha recordado al partido de hace menos de un mes contra el Huesca, con los jugadores menos habitual. El partido contra el Celta, a pesar de ser intranscendente a nivel de resultados para los blaugrana, era una gran ocasión para reivindicarse.

Riqui Puig Celta Barça EFE

Uno de los jugadores que hace pocos meses era titular y la afición estaba enamorada de él es Arthur. El brasileño ha perdido la titularidad por encima de Arturo Vidal que, a base de su espíritu de guerrero, se ha ganado la confianza de Valverde. El entrenador del Barça prefiere el juego más directo que el de toque y el chileno es el hombre ideal.

Arthur hubiera podido decir la última para intentar encontrar un lugar entre los once escogidos de Liverpool, pero se le ha visto desubicado en su función de pivote. Otro de los que ha mostrado un pésimo nivel sobre el césped es Boateng. El ghaneano parece no entender el juego azulgrana y contra el Celta no ha tenido ni una sola ocasión de peligro delante de la portería.

Aleñá se ha encontrado muy solo en el medio del campo y Riqui Puig ha dejado grandes detalles de calidad que no han podido generar oportunidades de gol. Valverde no ha podido tener la alegría que la segunda unidad del Barça haya funcionado, pero ahora toca poner las máximas energías para la vuelta de las semifinales de la Champions. La copa linda espera.