El caso de la heladería de Gràcia acusada de catalanofobia sigue generando ruido en las redes sociales entre los que denuncian la discriminación que aplica a los clientes que hablan catalán y la defensa que han hecho desde Argentina al establecimiento DellaOstia, que ha provocado la polémica y que el martes apareció vandalizado. El caso se originó el domingo pasado, cuando el conseller de distrito de ERC, Guillem Roma, explicó a través de las redes sociales que su pareja fue discriminada por dirigirse en catalán a un camarero que le recriminó que era "una maleducada" por hablar catalán cuando "estamos en el Reino de España". Este jueves, el Ayuntamiento de Barcelona ha opinado por primera vez sobre la controversia y en una entrevista a El Món a RAC1, el teniente de alcalde de Seguretat, Albert Batlle, ha dejado claro que "hay una normativa que se tiene que cumplir", sobre todo en un momento de descenso del uso social de catalán.

"Tenemos una situación de emergencia lingüística con respecto a nuestra lengua. Hay una falta de uso social del catalán, una de las señas de nuestro país", ha asegurado Batlle, quien ha remarcado que hay que crear instrumentos para hacer cumplir la normativa. En este sentido, ha recordado que desde el Ayuntamiento han creado la nueva figura de la Comisionada de Uso Social del Catalán, a cargo de la periodista y activista cultural Marta Salicrú, que espera que dé resultados. El teniente de alcalde se ha mostrado partidario de buscar el consenso. "Hay que buscar siempre el equilibrio, el diálogo y el convencimiento, ya que son elementos básicos de la convivencia" ha afirmado el político de Units per Avançar, quien reconoce que la normalización lingüística y el derecho a ser atendido en catalán son "temas delicados que se tienen que tratar con prudencia y sensibilidad".

El incendio de Gràcia puede ser un acto vandálico

Batlle también ha comentado otras cuestiones de la actualidad de Barcelona que han sido noticia en los últimos días, y que afectan cuestiones como la inseguridad y la delincuencia, como los que han afectado a las recientes fiestas del barrio de Gràcia. El político ha reconocido que el incendio del adornado de la calle Verdi podría ser provocado, aunque los Bombers no han llegado a ninguna conclusión sobre las causas del fuego, pero el teniente de alcaldía de Seguretat no descarta que haya podido ser producto de una gamberrada. "Los Bombers han dicho que el fuego era de origen desconocido; probablemente es cierto que es un acto vandálico", ha afirmado. Aun así, valora muy positivamente las mejoras en la seguridad, cree que la presencia policial en las calles y la coordinación de los cuerpos han hecho que las cosas funcionen mucho mejor, y con respecto a los incidentes con armas de fuego a plena luz del día, admite que "es un hecho preocupante" pero en ningún caso ve una tendencia al alza.

Con respecto a la huelga de socorristas en las playas de Barcelona, Batlle ha explicado que ha habido más de siete reuniones entre las partes, con mediación de la Generalitat, e insiste en que es un servicio temporal para los meses de verano, aunque admite que hacen falta mejoras en el sector. El teniente de alcaldía ha pedido responsabilidad a todas las partes, también a los bañistas.

La pelota, en el tejado del Barça

El retorno al Spotify Camp Nou también es otro de los aspectos que ha abordado durante la entrevista con RAC1 y se ha mostrado partidario de que el Barça tenga activado el plan B de ir a Montjuïc para jugar la primera fase de la Champions si no puede obtener la licencia de primera ocupación a tiempo, viendo la dificultad para cumplir los plazos de las obras. "La pelota está en el tejado del Barça, que tiene que cumplir las condiciones", en referencia a la licencia de primera ocupación. De hecho, ve probable que el club todavía tenga que jugar unos meses más en el Estadi Olímpic. El teniente de alcaldía de Seguretat ha dejado muy claro que hay que huir de las prisas y que el Ayuntamiento se tomará el tiempo que haga falta para asegurarse de que la vuelta se hará con todas las garantías, y receta prudencia al club blaugrana. "No nos pongamos presiones sobre los plazos, tenemos que ponérnoslas en las condiciones de la apertura, que se tiene que hacer con toda la seguridad del mundo". El teniente de alcalde recuerda las deficiencias que hubo en la segunda inauguración del Estadi Olímpic el verano de 1988. "Eso no puede volver a pasar".