Hace solo una semana, más de un millar de jóvenes desafiaron la lluvia intermitente para reunirse en un parque de Berlín con una misión tan simple como peculiar: comer pudin con un tenedor, en público, y colgarlo en las redes sociales. La escena forma parte de la última tendencia global impulsada desde TikTok e Instagram, conocida como Pudding mit Gabel (pudin con tenedor, en alemán). La actividad, que empezó como una anécdota en Alemania, ya ha saltado a otros países europeos e incluso ha cruzado el Atlántico. La convocatoria no tiene organizadores, ni patrocinadores ni objetivos comerciales. Alguien con suficientes seguidores publica un lugar y una hora, y centenares de personas —a veces miles— se presentan puntualmente con su pudin y su tenedor, aunque sea domingo y los supermercados estén cerrados.
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El primer Pudding mit Gabel se celebró a finales de agosto en Karlsruhe, una ciudad tranquila del suroeste de Alemania conocida sobre todo por ser la sede del Tribunal Supremo. Todo empezó con una fotocopia colgada en el escaparate de un comercio local que animaba a los vecinos a llevarse un pudin y un tenedor a la plaza Kronenplatz. La idea, tan absurda como irresistible, se propagó como la pólvora. En pocas semanas, se organizaron encuentros similares en Stuttgart, Hamburgo, Múnich, Hannover y decenas de otras localidades. Las reuniones siempre empiezan con calma, con grupos de jóvenes —la mayoría alrededor de los 20 años— compartiendo tenedores y conversaciones en corrillos reducidos. Pero a medida que pasan las horas, el ambiente cambia. Se pone música, aparecen cervezas, algunos encienden cigarrillos y lo que era una quedada absurda se transforma en una fiesta improvisada.
La moda del Pudding mit Gabel ha cruzado fronteras con una rapidez sorprendente y se ha convertido en un fenómeno global. En Suiza, Austria o el Reino Unido la generación Z ha encontrado en esta absurdidad aparente una cura inesperada para la soledad: reunirse en espacios públicos para comer pudin con tenedor, lentamente y en compañía de otros desconocidos. Incluso ha cruzado el Atlántico. En Washington D. C., la artista Nataly Merezhuk convocó un encuentro en Reddit con un mensaje entusiasta: “¡Hola, familia! Comeremos pudin con tenedor en Logan Circle este domingo a las 16:00. La cuestión es comer despacio y hacer nuevos amigos”. El éxito fue total, aunque mucha gente no encontró pudin y optó por el yogur. La tendencia se ha extendido rápidamente a los campus universitarios, como demuestra el vídeo publicado por la cuenta oficial de TikTok de la Northeastern University de Boston. Y en Nueva York ya se ha anunciado un encuentro el 19 de octubre en Central Park.